Putin reclama la retirada de las fuerzas militares de la OTAN de Bulgaria y Rumanía
Rusia demanda la retirada de las fuerzas extranjeras y de su armamento de Bulgaria y Rumanía, punto incluido en las garantías de seguridad que exige Moscú para evitar la expansión de la OTAN y el emplazamiento de armas ofensivas cerca de sus fronteras, afirmó hoy el Ministerio de Exteriores
de Rusia. “Se trata de la retirada de las fuerzas extranjeras, equipamiento bélico, armamento con el objetivo de retornar al estado existente en 1997 en los países que no eran miembros de la OTAN en aquel momento. Entre ellos están Bulgaria y Rumanía”, señaló la entidad diplomática.
Según el Ministerio de Exteriores, las propuestas rusas “fueron formuladas de un modo totalmente preciso que no admite ningún tipo de doble interpretación”.
En los últimos años, Rusia ha acusado a la OTAN de incrementar su presencia militar y el despliegue de armamento cerca de sus fronteras, desde los tres países bálticos –Lituania, Letonia y Estonia– hasta Polonia, Rumanía y Bulgaria, elementos estratégicos que Moscú considera una amenaza directa para su seguridad.
En particular Rusia ha condenado el emplazamiento de elementos estratégicos del escudo antimisiles de la OTAN en Rumanía, ya que estos pueden ser remodelados fácilmente para ser usados como lanzaderas de misiles.
La OTAN, en cambio, aseguró que no hay aliados “de primera o
segunda clase” como cree que sugiere Rusia con su propuesta de retirada de Bulgaria y Rumanía de las fuerzas extranjeras, en plena tensión por la acumulación de tropas que lleva a cabo Moscú junto a la frontera ucraniana.
“Las demandas de Rusia crearían miembros de la OTAN de primera y segunda clase, algo que no podemos aceptar”, indicó en un mensaje a la prensa la portavoz aliada, Oana Lungescu. Dejó claro que la OTAN “no renunciará a nuestra capacidad de protegernos y defendernos mutuamente, incluyendo con la presencia de tropas en la parte oriental de la Alianza”.