Las opciones de las librerías
Los autores de ‘Amasun’ le otorgan un espacio especial al papel que juegan las librerías, que asumen como “centros de socialización” de los lugares en los que se encuentran y que podrían terminar conviertiéndose, apuntan, en el canal conductor de entre autor y lector. “Nuevamente –indica el publicista David Baró–, si crees que vendes libros, tu competencia es Amazon y La Casa del Libro”. Frente a otros productos, además, el precio del libro está regulado, lo cual supone una ventaja: “Hoy día, el punto de mira de un librero no ha de ser el libro, sino el lector”. Ejemplos de cómo aprovechar este cambio de concepto hay muchos: Mr. B´s Emporium es una librería independiente en
Bath que ha desarrollado el “spa lector”: concebido como un cheque-regalo, el librero se toma un café contigo mientras charla sobre tus lecturas favoritas y te hace una selección. Un par de sillones, un hervidor y un sacrificado dependiente. Es una forma sofisticada de hacer lo que han hecho siempre en las librerías: aconsejar. Y de asegurar no sólo la compra presente, sino fidelización. “Las oportunidades de venta, como saben los tenderos desde siempre, salen hablando –añade Baró–. Los clientes no entran en una librería a que les des un libro: lo hacen por otros motivos, porque les gusta el ambiente, o tocar las páginas, porque les permite un momento de relax y distracción, etc”.