‘El Circo de la Alegría’, en el Villamarta y González Byass
Fredes Insa presenta su actuación benéfica para ayudar a los niños con cáncer de Jerez
El Circo de la Alegría’ llega a Jerez de la mano de la Escuela de Danza y Comedia Musical Fredes Insa, con el objetivo de hacer vibrar al público del Teatro Villamarta y de Tío Pepe Festival y, además, conseguir ayudar a los niños con cáncer con el cien por cien de la recaudación. Montante que este año va dirigido en exclusiva a la Fundación Manolo Maestre Dávila para la instalación, en el Hospital de Jerez, de 14 sillones-cama destinados a los acompañantes de pacientes de hematología y ocho camas para los acompañantes de las habitaciones burbuja. Una vez cubiertos estos elementos, se destinará el resto del dinero recaudado a la adquisición de consolas de videojuego para las habitaciones, con el objetivo de procurar un mayor movimiento de los niños y atajar el sedentarismo.
La promotora, Fredes Insa, señala que “los niños en tratamiento suelen pasar largas temporadas en el hospital y siempre van acompañados, por lo que nos parece fundamental que sus padres o familiares puedan descansar correctamente para estar llenos de energía, en definitiva, esta vez nos volcamos en cuidar a los que cuidan”. Para la Fundación es “un privilegio poder colaborar con este proyecto para dar apoyo y alegría a los niños de la Planta de Oncología Infantil del Hospital del Jerez”, como explica, Socorro Dávila, miembro del patronato.
Los ciudadanos podrán apoyar el proyecto con la compra de entradas del musical, ‘El Circo de la Alegría’, que tendrá tres pases; dos en el Villamarta (el día 2 de julio a las 18.00 y a las 21.00 horas por 18 euros) y una tercera actuación dentro de la programación de Tío Pepe Festival, organizado por González Byass (el 14 de julio a las 22.00 horas a partir de 18 euros). Entradas que se pueden conseguir en www.tickentradas.com, taquilla del Villamarta y de González Byass.
‘El Circo de la Alegría’ contará con más de 250 artistas amateurs de la escuela, desde los tres a los 78 años, 30 figurantes, 60 voluntarios, 600 disfraces y dos decorados a gran escala. Un proyecto que han trabajado niños y mayores durante más de seis meses para contar la historia de un circo, de gran fama mundial, que recala en Alemania justo antes de que estalle la II Guerra Mundial, recogiendo el aplauso del público alemán. Declarada la guerra, la gran familia del circo se ve atrapada sin posibilidad de salir del país y la carpa del circo queda destruida por una bomba. Los circenses tienen que reconstruirse ante la adversidad y, en ese proceso, contarán con la ayuda de unos niños muy especiales. Un argumento emocionante y trepidante con el que Fredes Insa quiere hacer vibrar tanto a los actores amateurs como al público en general, cumpliendo un sueño, “desde pequeña quería montar un circo y ahora es realidad, sé que la vida es una carrera de obstáculos como los que viven estos circenses pero me gustaría que imperara el color del circo”.