Una herramienta para facilitar el acceso a la financiación
El producto permite que desde la firma del préstamo el cliente conozca la cuota fija que va a pagar en los primeros cinco años
Financiación La hipoteca facilita el acceso para compra, autopromoción o rehabilitación de vivienda
■ Facilitar el acceso a la financiación para la compra, autopromoción o rehabilitación de viviendas es uno de los objetivos a los que está destinada la Hipoteca Mari Carmen Mixta de ABANCA, un producto que mantiene el tipo de interés fijo durante los cinco primeros años. Desde la entidad destacan que esta posibilidad «aporta tranquilidad al cliente, ya que puede contar con una cuota fija a un tipo de interés desde el 2,5% durante las primeras 60 mensualidades de su hipoteca».
La Hipoteca Mari Carmen Mixta puede solicitarse a un plazo máximo de 30 años, y al igual que el resto de las modalidades hipotecarias de esta línea, permite financiar hasta el 80% del menor de dos valores, que son el de la tasación de la vivienda o el precio de compraventa. Por ejemplo, si la vivienda cuesta 200.000 euros pero el valor de tasación actualizado es de 187.500 euros, se podrá solicitar como máximo el 80% de ese segundo valor, que es el menor. O sea, hasta 150.000 euros.
A mayores, la contratación de esta hipoteca no repercute al cliente los gastos de notaría, registro y gestoría.
Esta hipoteca de ABANCA permite que desde la firma del préstamo el cliente conozca la cuota fija que va a pagar en los primeros cinco años. A partir del sexto año, y durante el plazo restante, el tipo de interés de la hipoteca pasa a ser variable, y suma al euríbor a 12 meses un margen.
Desde la entidad destacan que «gracias a esta modalidad hipotecaria de ABANCA el cliente
Fijo y variable El producto ofrece una cuota fija durante 60 meses e interés variable a partir del sexto año
puede beneficiarse de unas tarifas que se sitúan en este momento entre las más competitivas del mercado español». La Hipoteca Mari Carmen Mixta puede bonificarse a través de la contratación adicional de productos o servicios básicos como domiciliación de nómina o seguros sociales, seguros de vida y de hogar, tarjeta de crédito de ABANCA...
En el caso de alcanzar la máxima bonificación por la contratación de estos productos o servicios con el banco, el cliente puede obtener un tipo de interés fijo del 2,50% durante los cinco primeros años; y a partir del sexto año el euríbor a 12 meses más un 0,60%.
Según explica la directora de Desarrollo de Negocio de ABANCA, Saray Cendón, «con esta alternativa de financiación queremos ofrecer a nuestros clientes las mejores condiciones de una hipoteca fija y de una variable». Por eso subraya que el producto «aporta tranquilidad al cliente y seguridad durante los primeros años de la hipoteca, que coinciden habitualmente con el período de mayor carga de intereses, y le permite beneficiarse de una posible bajada de tipos en un futuro, con una de las tarifas más bajas del sector ahora mismo».
El plazo máximo de contratación de la Hipoteca Mari Carmen Mixta de ABANCA es de 30 años si se es menor de 45 años. Con una edad superior el plazo de amortización deberá ser más corto, puesto que la hipoteca debe de acabar de pagarse antes de cumplir los 75 años. También puede amortizarse total o parcialmente si se desea pagar antes del plazo pactado.
Este producto refuerza el catálogo de préstamos hipotecarios de ABANCA, que contempla también soluciones diferenciales para algunos casos concretos, como la Hipoteca Mari Carmen para viviendas eficientes. En este caso concreto, se bonifica el tipo de interés durante el primer año si el inmueble cuenta con una calificación energética A o B.
En la página web de la entidad financiera puede encontrarse toda la información sobre las condiciones de la Hipoteca Mari Carmen Mixta y otras modalidades de la oferta financiera de la entidad para adquisición de vivienda.
Bonificaciones La contratación de productos o servicios básicos de ABANCA rebaja el interés a pagar
y no se cubren vacaciones, descansos y/o bajas laborables. Por eso se deja a los vecinos de los pueblos sin atención sanitaria durante semanas, como pasa en el valle de Fornela, donde el médico solo pasa consulta una vez a la semana en Peranzanes y eso contando con que no haya ningún contratiempo por el que tenga que quedarse a consultar en el centro de salud de Fabero. De ser así, los fornelos pueden pasar, y así ha sucedido, «entre tres y cuatro semanas sin médico», explicó la alcaldesa de Peranzanes, Henar García.
El descubierto se repite en todos los municipios del área de salud. «Desde hace dos veranos no se están cubriendo las bajas y, sobre todo, las vacaciones de los profesionales», dijo el alcalde de Candín, José Antonio Álvarez Cachón, que lamentó que «lejos de mejorar, la situación empeora» y, lo peor de todo, «no hay ninguna planificación ni a corto ni a medio ni a largo plazo». El regidor de Candín considera que la Junta de Castilla y León «ha tenido tiempo para tratar de poner soluciones» sin que estas hayan llegado y tiene esperanzas en que así sea.
Los vecinos aseguran que con la pandemia la atención sanitaria empeoró. No les gusta la cita previa ni que cuando necesitan ir al médico les programen la consulta para una semana después. Tampoco quieren tener que ir a Toreno para hacerse una radiografía cuando en el centro de salud de Fabero está preparada la sala a esperar de recibir algún equipo «que ya deberíamos tener por lo menos desde los 90», afirmó la alcalde, María Paz Martínez.
En Vega de Espinareda, más de lo mismo. Si algún día el centro de salud de Fabero necesita un refuerzo de personal por falta de médicos, en Vega sufren las consecuencias porque el suyo cambia de consulta para cubrir ese vacío. «Es un cambio de cromos» que resuelve en un sitio pero perjudica a otro, se lamentó el alcalde, Javier Salgado.
Los cuatro municipios del mismo área de salud que salieron a la calle a defender la sanidad rural este jueves suman más de 8.000 vecinos. Una cifra que se multiplica varias veces durante la época estival, cuando los problemas por falta de medios crecen de igual manera. Solo Lillo del Bierzo, que es uno de los pueblos que se ha quedado sin médico, tiene 400 cartillas sanitarias. Son números suficientes, defienden los manifestantes, contrarios no obstante a la aplicación de «criterios numéricos, como los cupos de cartillas asignados a cada profesional, o de rentabilidad para justificar el recorte de profesionales». Del total de cartillas sanitarias del área de salud, unas 400 corresponden a Pediatría y ni siquiera ese servicio está garantizado.
Entre los asistentes a la manifestación, hubo varios representantes políticos, como el presidente del Consejo Comarcal de El Bierzo, Olegario Ramón; el secretario general del PSOE leonés, Javier Alfonso Cendón; y la parlamentaria socialista en las Cortes de Castilla y León Nuria Rubio.