Testigos de la defensa dicen que Adur y Jokin se llamaron para localizar a un amigo
Varios testifican a favor de Iñaki, Aratz, Jon Ander, Julen y Ainara y afirman que ni pegaron ni amenazaron
MADRID/PAMPLONA – La tesis acusatoria que sustenta el delito de terrorismo de Alsasua alberga la idea de que los hechos ocurridos ese 15 de octubre no fueron casualidad y que se trató de una agresión organizada y premeditada, según la Fiscalía. Una de las circunstancias en las que basa dicha teoría es que los acusados se avisaron a través de sus teléfonos de que en el Koxka había presencia de los guardias civiles y el informe de los investigadores del Instituto Armado señala, en este apartado, que sobre las 3.30 horas hubo un cruce de llamadas entre dos de ellos, Adur Ramírez y Jokin Unamuno, que llevan año y medio encarcelados. Ellos declararon que Adur estaba en casa y recibió la llamada de la hermana de un amigo suyo, al que trataba de localizar porque se iba esa misma mañana a coger un vuelo a Bilbao para desplazarse a Praga, donde iba a cursar Erasmus. De hecho, por él hicieron esa noche una cena de despedida.
Ayer testificaron la hermana del estudiante, el propio amigo y el padre de ambos. Los tres refrendaron que el muchacho había quedado para estar en casa a las 3.30 horas, porque a las 7 salía su vuelo y que se había quedado sin batería en el móvil. “De ahí que llamamos a sus amigos para saber si sabían dónde estaban”, declararon. Y así, Adur declaró que esa noche llamó a Jokin por si había visto al amigo para que le dijera que volviera ya a casa.
AINARA NO AMENAZÓ Ayer también declararon varios amigos y los jefes del trabajo de Iñaki Abad, que afirmaron que es “tranquilo, noble y que nunca le pegaría a nadie”, y que esa noche salió tarde del trabajo, sobre las cuatro, y que durante el incidente en el exterior del Koxka solo observaba desde la calle y le tiraron el móvil al suelo. Testificaron además el novio y una amiga de Ainara Urkijo, quienes aseguraron que la procesada “se alteró con un policía foral en la calle”, pero que nunca amenazó a la novia del sargento, tal y como se recoge en los escritos de acusación. Asimismo, acudieron a la Sala, amigos de Aratz Urrizola para manifestar que este tampoco estaba a esa hora en el Koxka, y de Julen y Jon Ander para ratificar que no estuvieron en ninguna pelea.
“El sargento levantaba la ropa a cualquiera de los chavales que veía. Uno le dijo: qué te crees, que llevo pistola...” TESTIGO DE IÑAKI ABAD