Iceta no ve comparable la situación política de Navarra y Catalunya
El líder del PSC, ayer en Pamplona, aboga por “la convivencia y el respeto”, y no por los “bloques” ● Cree que entre las lenguas propias tiene que haber “respeto mutuo”
PAMPLONA – Suele ser recomendable en cualquier ámbito profesional (y especialmente en la política) que, de vez en cuando, por las rendijas de la oficina (o de la sede) se cuele algo de aire fresco. Que mueva el viento para que se ventilen las ideas y se vayan los folios secos de los argumentarios. En cierto sentido, eso es un poco lo que ha ocurrido en el PSN con la reciente visita a Pamplona de Miquel Iceta, primer secretario del PSC.
El líder de los socialistas de Catalunya, en una breve visita a la capital navarra para participar en el Foro Ser Navarra, mantuvo un discurso bien diferenciado al de sus homólogos en la Comunidad Foral en materia de política lingüística, tarea de oposición e incluso en visión de Navarra en el resto del Estado, hasta el punto que corrigió a sus compañeros del PSN al ser muy excéptico a la hora de “establecer paralelismos” entre la situación política de Catalunya y la de Navarra. Un argumento que, si bien los socialistas navarros no han enarbolado con tanta profusión como la derecha de UPN y PP, sí que esbozan cuando critican un supuesto excesivo peso del “nacionalismo vasco” en el quehacer del Gobierno foral, y que para los de María Chivite invalida el actual modelo implantado por las fuerzas del cambio.
Sobre ese y otros aspectos importantes mantuvo un discurso diferente Iceta, como cuando habló de política lingüística o el papel en la oposición. Iceta abogó por apostar por “la convivencia y el respeto” y no por la cultura de los “bloques”, precisamente esos en los que suele caer el PSN, habitualmente haciendo seguidismo de las políticas y posicionamientos de UPN y PP.
Por contra, hizo un elogio del “pacto” y confió, con una fórmula que casi suena a compromiso, a que Chivite es sinónimo de pacto, y que de ser navarro la apoyaría por identificarse con ella como “dos gotas de agua”. Cabe deducir, no obstante, que la idea de pacto que puede tener el líder del PSC, que en Catalunya ha abogado por un acuerdo de mínimos con ERC y Podemos y un presidente independiente, es diferente a la que todavía hoy no descarta claramente Chivite, que sólo excluye de sus pactos de Gobierno a EH Bildu y al PP, pero no a la derecha de UPN o al antiforalismo de Ciudadanos.
BILINGÜISMO Por eso algunos de los planteamientos sonaron como un pequeño reproche al PSN. Eso sin tener en cuenta que no es descartable que la presencia de Iceta en la ejecutiva del PSN del jueves moviese a los socialistas navarros a corregir su amago de salirse de la comisión parlamentaria que estudia la nueva Ley de Euskera. A través de una nota enviada el miércoles, el PSN aseguraba que estaba meditando la posibilidad de abandonar el foro de debate, siguiendo los pasos, otra vez, de UPN y PP.
Pero casualmente, el jueves por la noche y tras la visita de Iceta el PSN se lo pensaba mejor y decidía quedarse en la comisión. Una decisión quién sabe si recomendada por el líder del PSC, abierto defensor de la enseñanza con el catalán como lengua vehicular, que ayer en el desayuno consideraba que “cada comunidad autónoma tiene que encontrar MIQUEL ICETA su política lingüística”, pero con el objetivo de conseguir “la convivencia entre lenguas”, para que no sean un factor de división sino de respeto mutuo”. “La posición de los socialistas es de amor a las lenguas. Con realidades lingüísticas muy diversas, queremos el castellano, el euskera y el catalán, y en cada lugar nos adaptamos a la mejor manera para lo que nos parece lo mejor, y es que todo el mundo dominara todas las lenguas”, precisó, abogando por un bilingüismo que, quizá a día de hoy, esté lejos de los postulados que defiende el PSN, por mucho que Iceta dijese que esa política es la que él defendería.
CIUDADANOS Y FUEROS Por último, el dirigente del PSC se refirió también al régimen foral de Navarra para señalar que “no es necesario tocar aquello que funciona”, parafraseando lo que dijo que es un refrán estadounidense. En ese sentido, rechazó que Ciudadanos cuestione el Concierto vasco y el Convenio navarro. “¿Pero es que no funciona bien?”, planteó, para rechazar “el adanismo, ese sentimiento de algunos de que la historia empieza cuando algunos entran en escena”. “Siempre hay que mantener una tensión de mejora, pero no sobre la base de hacer tabla rasa. Creo que eso no es una aportación positiva, pero yo respeto sus posiciones”, dijo. Se trata de buscar encajes, de la misma manera que defendió que Catalunya es “una nación” y que la tarea tiene que ser engarzar de manera democrática “el deseo de gobernar con el de convivir en España”. ●
“No me atrevo a establecer paralelismos políticos entre Navarra y Catalunya”
“Los socialistas amamos las lenguas y lo que mejor nos parece es que todo el mundo las domine”
“Si el régimen foral funciona, no hay que tocarlo. Hay que alejarse de posturas adanistas”
Primer secretario del PSC