EL ALCALDE NIEGA QUE HAYA CLIMA DE TERRORISMO EN ALTSASU
El tribunal admite el vídeo en el que se ve al sargento tirar el móvil de un acusado y las imágenes de Adur en la pelota
MADRID/PAMPLONA – El alcalde de Alsasua, Javier Ollo, negó ayer en el juicio contra los ocho supuestos agresores de dos guardias civiles y sus parejas que en la localidad navarra haya un clima de terrorismo latente o kale borroka y, asimismo, denunció la “desproporción judicial” con que se está abordando el procedimiento penal.
El primer edil, de Geroa Bai, declaró ayer como testigo a petición de las defensas en la quinta jornada del juicio que se celebra en la Audiencia Nacional, junto con otra veintena más de testigos llamados por los abogados de los encausados. Javier Ollo, que en la madrugada de la agresión acudió a la comisaría a interesarse por el detenido en el altercado (Jokin Unamuno estaba arrestado e Iñaki Abad le pidió que se interesara por lo ocurrido), explicó que en un primer momento el Ayuntamiento de la localidad realizó una declaración solidarizándose con las víctimas y que la institución que preside “nunca se ha posicionado a favor de ninguna de las partes. No es una cuestión de bandos, de estar con unos y con otros, todas las personas de este proceso lo están pasando mal. Sí que es verdad que la atención del Ayuntamiento a partir de ese momento ha estado más enfocada en las personas entonces investigadas y ahora acusadas y sus familias debido a la desproporción judicial que se está produciendo en torno a este caso”.
REIVINDICACIÓN JUSTA El regidor reconoció también que asistió el pasado sábado a la manifestación celebrada en Pamplona para pedir “justicia” para los acusados, pero afirmó que el objetivo de la misma no era “apoyarles”, sino “pedir proporcionalidad judicial”. Además, recordó que acudió a otra marcha que se convocó en Alsasua algo más de un mes después de los hechos para denunciar la “imagen que se había trasladado del municipio en algunos medios de comunicación porque no era real”.
A preguntas de las acusaciones, Ollo quiso dejar claro que dichas convocatorias no pedían la impunidad de los acusados, sino “sólo proporcionalidad”.
Ollo explicó que conoce a los guardias civiles que están destinados en Alsasua porque en su labor como lar”, porque “no tiene motivos para no hacerlo” y que la Delegación del Gobierno nunca ha puesto ningún impedimento.
En 2015 dijo que hubo un incidente, cuando la Guardia Civil entró en el pueblo “aunque habíamos acordado que si era necesario que accedieran, nos avisaran antes para tratar de mediar en lo que ocurriera y no nos avisaron. Lo hizo una vecina”. Y manifestó que en el año 2016 no ocurrió nada reseñable. Por último, subrayó que en Alsasua “ya no existe ningún tipo de actividades” de la kale borroka y que “la realidad social” del municipio es “mucho mejor que hace 15 o 20 años” y que “se están dando pasos importantes en pro de la convivencia”. ●