Mariano Barroso, nuevo presidente de la Academia de Cine
Su propósito es seguir el camino que inició Yvonne Blake y crear un lugar “para todos los cineastas”
MADRID – Mariano Barroso fue elegido ayer como nuevo presidente de la Academia de Cine con 315 votos favorables, un apoyo con el que seguirá el camino “ya iniciado” con Yvonne Blake, que sufrió un ictus en enero, de “hacer una Academia abierta” y con el objetivo de reunirse “a ser posible esta semana” con el ministro de Cultura y Deporte, Màxim Huerta.
Barroso lideraba la única terna a presidir en la Academia, con el productor Rafael Portela y la actriz Nora Navas en la primera y segunda vicepresidencia, respectivamente. “Nuestra idea es seguir un camino que ya iniciamos y que tiene que ver sobre todo con la apertura, hacer una Academia abierta, un lugar que acoja a todos los cineastas”, anunció en la rueda de prensa el presidente electo, que ocupaba el cargo en funciones desde la baja por enfermedad de Yvonne Blake.
Barroso manifestó el deseo de la nueva cúpula de reunirse “a ser posible esta semana” con el nuevo ministro de Cultura y Deporte para trasladarle “varias cuestiones urgentes”. Entre ellas abordará el “reconocimiento de la industria del cine como una industria estratégica, que merece toda la atención y toda la prioridad para el Gobierno”.
“El cine es una industria que sirve al Estado, no que se sirva del Estado” puntualizó Barroso, al tiempo que añadió que en esta reunión se pedirá al ministro que “ponga en marcha la orden ministerial” que ya está encima de la mesa para “agilizar los rodajes que hay para el resto del año”.
El presidente también anunció en su primera comparecencia ante los medios que Andreu Buenafuente y Silvia Abril presentarán la próxima gala de los Premios Goya, una que “en principio” se celebrará en Madrid. “No estamos inventando nada. Andreu es un showman de televisión y Silvia una showwoman, y los dos son fantásticos, así que estamos verdaderamente orgullosos”.
El vicepresidente primero, Rafael Portela, incidió en que el trabajo de la Academia debería “pensarse como un rodaje” en el que “todos trabajen por un bien común”, mientras que la vicepresidente segunda, Nora Navas, no pudo acudir a la comparecencia por motivos laborales.