EUSKO IKASKUNTZA, UN SIGLO CONSTRUYENDO PAÍS DESDE LA CIENCIA
● La Sociedad de Estudios Vascos celebra su centenario trabajando por el futuro ● Navarra ha contado con un importante peso específico en su trayectoria
Eusko Ikaskuntza-sociedad de Estudios Vascos cumple un siglo de vida, 100 años construyendo país desde la Ciencia. Las cuatro diputaciones (Navarra, Gipuzkoa, Araba y Bizkaia) renovaron recientemente su compromiso con una institución sin fronteras que aúna todos los territorios en favor del progreso, la cultura y la investigación. Eusko Ikaskuntza se encuentra en plena celebración de su centenario. Navarra, que acogerá en octubre un evento propio dentro del XVIII Congreso titulado Geroa Elkarrekin/haciendo futuro juntos que concluye en Oñati, siempre ha tenido un peso específico importante. Un navarro, Goio Monreal ha sido presidente de esta entidad sucediendo a Julian Elorza (1918-36) y José Miguel Barandiaran (1978-91) antes de dar paso a Juan José Goiriena, Javier Retegi, José Mª Muñoa e Iñaki Dorronsoro, actual presidente. A continuación se repasan los hitos más importantes en 100 años de historia desde esta óptica.
LOS ORÍGENES 1918-1920 De Oñati a Pamplona, con el II Congreso
Eusko Ikaskuntza se fundó como resultado del I Congreso de Estudios Vascos, celebrado en Oñati en septiembre de 1918, a iniciativa de las Diputaciones de Navarra, Araba, Gipuzkoa y Bizkaia. De ahí su aniversario. Ya con la Sociedad de Estudios Vascos como entidad organizadora, en julio de 1920 se celebraba el II Congreso de Estudios Vascos. La Diputación de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona fueron sus impulsores. El tema abordado fue la Enseñanza y las Cuestiones económico-sociales. Ese último epígrafe se subdividió en cinco áreas: Estadística, Problemas de la tierra y marítimos, Habitación, Seguros, y
Capital y Banca. El II Congreso gozó de un altísimo nivel de participantes. Dos mujeres dictaron lecciones: María de Maeztu, fundadora de la Residencia Internacional de Señoritas de Madrid, y María Ana Sanz, Directora de la Escuela Normal de Maestras de Navarra. El Congreso contó con la presencia del rey Alfonso XIII, presidente de Honor de la Sociedad desde 1918. En los claustros de la catedral de Pamplona se alojó una “Exposición de Arte Retrospectivo”. Fue la segunda exposición general de arte navarro de toda la Historia (la primera fue en 1883). Se exhibió un amplio muestrario del patrimonio de las merindades: Historia, pintura, escultura, cerámica y esmalte, mobiliario, heráldica...
EL IMPULSO DE CAMPIÓN Años veinte El interés por la Historia con Iruña como sede
En el periodo que va desde su fundación hasta la guerra civil Eusko Ikaskuntza celebraría otros seis congreso, algunos de ellos muy importantes como el de Gernika (1922) sobre lengua y enseñanza o el de Vitoriagasteiz (1926) sobre orientación y enseñanzas profesionales. Navarra no perdió el pulso en esta etapa. En 1921, Arturo Campión convocó a “cuantos se interesaban por el cultivo y divulgación de la Historia de Álava, Guipúzcoa, Navarra y Vizcaya, ora particularmente consideradas, ora en sus mutuas relaciones como integrantes de una unidad superior”, a agruparse en un Instituto de Estudios Históricos del País Vasco con sede en Pamplona. El centro fue reconocido como filial por la Sociedad de la que Campion era presidente de Honor. Coetáneos a los de la Universidad de Zaragoza en Jaca, unánimemente considerados como los más antiguos de España, en 1927 la Sociedad de Estudios Vascos empezó a organizar Cursos de Verano. Se prolongaron hasta el verano de 1936. Ese mismo año, se programó también un Congreso sobre Estudios Históricos. Durante este periodo Eusko Ikaskuntza también celebró dos asambleas sobre problemas municipales (1919) y pesca (1925).
POLÍTICA Y DERECHO 1931, año clave El hito del estatuto autonómico vasconavarro
A pesar de tratarse de un intento fallido, el Anteproyecto de Estatuto de Autonomía Vasco-navarro de 1931 ha quedado como un hito de nuestra historia moderna. Primer gran esfuerzo de unión y de síntesis de voluntades, Eusko Ikaskuntza consiguió que intelectuales y políticos de todas las tendencias rastrearan en busca de un común denominador entre las diferentes visiones del pasado y del futuro de Vasconia. La Comisión encargada de la redacción del
anteproyecto estaba integrada por prestigiosos juristas. Su responsable en Navarra era Luis Oroz, abogado, secretario de la Diputación de Navarra, quien jugó un destacadísimo papel en la redacción final del texto. El anteproyecto de Estatuto de Autonomía se presentó el 31 de mayo de 1931, a falta de cuatro semanas para las elecciones a Cortes constituyentes de la República. En ese clima preelectoral, el llamado Estatuto de la Sociedad de Estudios Vascos se convirtió en despensa a la que acudieron las distintas fuerzas políticas en liza para redactar sus propias versiones.
EL PARÓN DEL FRANQUISMO 1936-1977 La guerra civil frustró un congreso en Estella
La siguiente gran cita iba a ser en Estella, del 6 al 13 de septiembre de 1936 con el VII Congreso de Estudios Vascos, que trataría once temas: Cuestiones de orígenes en la Historia Vasca; Historia Eclesiástica del País Vasco y sus diócesis; Los grandes monasterios del País; Proceso histórico de la vida del euskera; Navarra y sus relaciones con los demás pueblos vascos; Los navegantes y pescadores vascos; Álava y Navarra en la historia de la unidad vasca; La vida social, económica y del trabajo en la Historia Vasca; Los vascos fuera del País; Instituciones del País Vasco; Bibliografía de las luchas civiles del siglo XIX. El estallido de la guerra civil impidió su celebración. Era un gran programa.
LA REVITALIZACIÓN 1977-1987 Del resurgimiento en Oñati tras Franco al X Congreso en Pamplona
Tras cuarenta años de forzoso silencio, en 1977 se produjo el reagrupamiento de los integrantes de la Eusko Ikaskuntza de preguerra, con los jóvenes que deseaban revitalizarla. La asamblea que tomó tal decisión se celebró en Oñati en septiembre de 1978 y estuvo precedida de un acto académico, el primero que celebraba Eusko Ikaskuntza desde 1936. Trece especialistas hicieron balance de la situación en las diferentes disciplinas de los estudios vascos: entre ellos, Julio Caro Baroja (Antropología y Etnografía), Francisco Salinas Quijada (estudios y trabajos jurídico-forales navarros) y Jorge de Riezu (Música y Folklore). Navarra también retomó el pulso de la institución tras la dictadura hasta el punto de que en 1987 acogió un nuevo evento. El X Congreso de Estudios Vascos (Pamplona, abril de 1987) estuvo dedicado monográficamente a archivos, bibliotecas y museos. Por una parte, se invitó a profesionales, técnicos, representantes institucionales y estudiosos para que hicieran diagnóstico del estado de situación y de los principales déficits. De otro lado, se dieron a conocer experiencias ensayadas en otras latitudes, proyectos en marcha y aspectos técnicos ya en el umbral de la informática y de las nuevas tecnologías. Se instalaron tres exposiciones directamente relacionadas con la temática del Congreso: la imprenta en Navarra; conservación y restauración en el museo; y publicaciones de archivos, bibliotecas y museos. El X Congreso derivaría en jornadas de metodología de la investigación en archivos; cursos de bibliotecología, archivística, paleografía y diplomática; planificación, organización y documentación. Se empezaron a realizar catalogaciones, inventariados y ordenación tanto de archivos como de fondos y de bibliotecas. Eusko Ikaskuntza desplegó una labor básica para que la tarea de la investigación histórica cobrara su imprescindible vuelo después de años de abandono.
CONSOLIDACIÓN Años 90 y arranque siglo XXI Modernización sin perder las esencias
Los años 90, de la mano de Goio Monreal, arrancan como un ejercicio de modernización y consolidación de la institución que amplía sus campos sin perder las raíces. El acompañamiento de las vicepresidencias navarras es importante. El mayor borrón de esta etapa fue la decisión de UPN de suspender el convenio con Eusko Ikaskuntza en 2011, cuestión subsanada en 2016 por el gobierno del cambio.
ANIVERSARIO 2018 Una mirada al pasado, pensando en el futuro
En 2018 se cumplen cien años de la fundación de Eusko Ikaskuntza y cuarenta de la reanudación de sus actividades tras cuatro décadas de prohibición en territorio peninsular (1936-1978). Esta doble efemérides se va a conmemorar con diferentes actos que culminarán con el XVIII Congreso de Estudios Vascos.
En el Congreso se presentarán las conclusiones generales del proceso que denominamos Geroa Elkar-ekin / Haciendo futuro juntos. El programa del XVIII Congreso de Estudios Vascos se estructura en cinco áreas temáticas. Cada sección celebrará sus sesiones en una capital. Pamplona será escenario el 18 de octubre de la sesión del área Sociedad Vasca: Cultura e Identidad. Los resultados de los trabajos de ese grupo, unidos a los de las restantes cuatro secciones, confluirán en dos sesiones plenarias en el Congreso que se celebrarán los días 23 y 24 de noviembre en Oñati. Un siglo de vida con punto y seguido. ●