ALONSO GANA EN LE MANS
RESISTENCIA EL PILOTO ASTURIANO, QUE SE ESTRENABA EN LA PRUEBA, AYUDA A TOYOTA A HACER HISTORIA
LE MANS (FRANCIA) – Toyota se sacudió los fantasmas del pasado y, sin que casi nada le fallara, se impuso por primera vez en las 24 Horas de Le Mans, un triunfo que llegó por la implacable actuación del TS050 Hybrid nº8 en el que el español Fernado Alonso imprimió su sello de piloto excepcional con una intervención soberbia de madrugada.
Toyota quería a Alonso para este momento y el asturiano no decepcionó. Lo mejor que aún alberga en su conducción, junto a un coche con una fiabilidad a prueba de bombas, permitieron a la marca japonesa enterrar una serie de episodios en el circuito de La Sarthe que le han perseguido hasta convertirse en un azote.
El año pasado, la negación de Toyota en Le Mans fue absoluta, y entregó casi en bandeja la victoria a Porsche. Pero la madre de todas las desgracias fue en la edición del 2016, cuando el Toyota de Kazuki Nakajima se paró en la línea de meta cuando sólo le quedaba por recorrer la última vuelta. Para desesperación de todo el garaje y la infraestructura de Toyota, Porsche se llevó el triunfo.
Dos años después, quizá Toyota no ha querido rizar el rizo con Alonso como último piloto en entrar con el coche en la meta para la gran fotografía, y le volvió a dar la oportunidad a Kazuki Nakajima para que fuera él y no otro el primero en ver la bandera a cuadros, como debió suceder en 2016.
Hechas las paces ya con la historia, Toyota inscribe su nombre en el palmarés de Le Mans por primera vez, toma ventaja en la clasificación del Mundial de Resistencia (WEC) y encumbra también a un Fernando Alonso que repite en lo alto del podio, como sucedió en Spa, donde ganó su primera prueba en el WEC para romper también con cinco años de sequía, desde que en el 2013 se había subido por última vez a lo alto del cajón, cuando en el GP de España ganó en Montmeló con el Ferrari.
Para Alonso quedarán episodios que entrarán en la historia del trazado francés, como la persecución al líder (el argentino José María Pechito López) que llevó a cabo en su primer relevo.
O en la remontada durante la madrugada, cuando entró en la segunda tanda para tomar su coche con una desventaja de 2:20 minutos que le había dejado su compañero el suizo Sébastien Buemi por un error en la conducción que le originó una penalización. El asturiano acabó rebajando el crono 93 segundos en una exhibición de conducción de la marca Alonso.
Fernando Alonso, ganador con su equipo en la edición 86 de las 24 Horas de Le Mans,señaló al final de la carrera francesa que encuentra atractivo buscar la triple corona, que se otorga al ganador del GP de Mónaco, de las 500 Millas de Indianálopis y de la de resistencia francesa.
“La triple corona sigue siendo un objetivo muy atractivo, que solo un hombre en la historia lo ha hecho (Graham Hill). También estoy intentando ganar el Mundial de resistencia y también tengo el Mundial de F1, pues también sería una triple corona”, ha apuntado.
“Es cierto que cuando tienes Le Mans y solo falta uno, te llama un poco más. Tengo que pensar después del verano qué puedo hacer, pero hoy no quiero ni pensar ni hablar de ello. Sería no disfrutar de este momento”, ha asegurado. Hoy “es un día muy importante e histórico”.
“La triple corona sigue siendo un objetivo muy atractivo, que solo un hombre ha conseguido” FERNANDO ALONSO Vencedor de la prueba