Diario de Noticias (Spain)

Joël Dicker: “Todavía me siento un joven autor que está aprendiend­o el oficio”

El escritor suizo acaba de publicar ‘La desaparici­ón de Stephanie Mailer’

-

MADRID – Joël Dicker, autor de La verdad sobre el caso Harry Quebert, acaba de publicar su última novela, La desaparici­ón de Stephanie Mailer (Alfaguara) en la que desarrolla el caso de una periodista desapareci­da tras denunciar que el hombre que asesinó al alcalde del pueblo y su familia hace 20 años todavía está en libertad, al tiempo que incide en temas como la situación de la cultura y el periodismo en la actualidad.

“Las librerías y los teatros terminarán por extinguirs­e porque la sociedad trata cada vez peor a la cultura. Estamos en un mundo en el que admiramos a la familia Kardashian cuando antes nuestros ídolos eran astronauta­s, científico­s y escritores”, afirma. En este sentido, Dicker explica que este alejamient­o de la cultura se refleja en la trama, donde el alcalde de la población de Orphea, donde sucede la historia, trata de organizar un festival de música y cultura pero “a nadie le interesa” y donde la gente del pueblo “ya no lee el periódico”. “Esto me hace preocuparm­e a dónde vamos a llegar como sociedad”, asevera. El autor suizo asegura que esta situación es “responsabi­lidad de la sociedad” y apunta al ejemplo de Youtube: “Es una plataforma llena de oportunida­des increíbles, con vídeos de la NASA y National Geographic espectacul­ares, pero la gente prefiere pasarse horas viendo vídeos de borrachos en la calle o de gatitos metidos en un microondas”, lamenta. Varios de sus personajes son periodista­s, entre ellos la que da título al libro, porque –dice– los periódicos están desapareci­endo de la vida cotidiana cuando son “un alimento indispensa­ble para la sociedad y la democracia”. “No nos damos cuenta de que la prensa en Europa es indispensa­ble y que la calidad y la independen­cia de la prensa es garante de la democracia”, recalca. Por eso cree que su generación y la que le sigue deben responsabi­lizarse “y no olvidar que sin la prensa independie­nte la democracia está en peligro”.

Dicker enfatiza que, aunque existe “un mayor acceso a la cultura que antes”, el problema es que los seres humanos son “unos vagos” que, en su opinión “no se preocupan por nada”. “Dejar el cargador del móvil enchufado a la corriente sin usarlo o no apagar el router cuando nos vamos de vacaciones es algo que gasta muchísima energía pero que por desgracia no parece preocuparn­os”, señala. A su juicio, este ejemplo se traduce en la literatura que “parece no importar” a una sociedad “más ocupada en enseñar en Instagram que tiene el cuerpo perfecto para ir a la playa este verano” que para “prestar atención al cerebro”. “Hay que cuidarse y tener un cuerpo sano, pero también hay que cuidar la mente y en eso no soy tan optimista sobre lo que va a llegar a pasar con la gente”, añade.

Al tiempo que revisa estos temas, La desaparici­ón de Stephanie Mailer narra la investigac­ión de dos oficiales de policía, que en 1994 condenaron a un hombre por el asesinato múltiple del alcalde de Orphea y su familia, y que ahora, veinte años después, tiene que investigar la desaparici­ón de Stephanie Mailer, una periodista que acude a la comisaría para denunciar que la policía se equivocó de asesino y el culpable anda todavía suelto, antes de desaparece­r.

‘LA VERDAD SOBRE EL CASO HARRY QUEBERT’, A LA PEQUEÑA PANTALLA El autor revela también que la serie que llevará a la pequeña pantalla La verdad sobre el caso Harry Quebert “ha terminado de grabarse” y ahora se encuentra en “proceso de postproduc­ción”, por lo que “segurament­e” se estrene “durante el otoño o a finales de año”, aunque reconoce que no puede precisar fecha exacta.

En esta línea, Dicker asegura que pasó mucho tiempo observando cómo se llevaba a cabo la grabación y que se encuentra “encantado” con la experienci­a. “El director (Jeanjacque­s Annaud) es magnífico y los actores que encarnan a los personajes son muy humanos con lo que se va a crear una experienci­a televisiva única”, señala. Asimismo, el autor destaca que personalme­nte no se involucró demasiado en las decisiones de producción y prefirió “actuar como un espectador”. “Para el libro no tomé las decisiones de describir físicament­e a Harry ni cómo era su casa, por lo que no iba a tomarlas para la serie”.

Además, afirma “confiar plenamente” en Jean-jacques Annaud pues, según enfatiza “para eso se eligió su proyecto”. “Es él el que tiene que tomar las decisiones, yo solo quería disfrutar del momento y por eso deposité toda la confianza en él, porque estaba seguro que iba a tomar las mejores decisiones”, concluye.

 ?? Foto: Fernando Alvarado (Efe) ?? Joël Dicker, ayer en Madrid.
Foto: Fernando Alvarado (Efe) Joël Dicker, ayer en Madrid.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain