Hospital San Juan ‘del protocolo’
Soy hija de un paciente, el cual después de 40 días ingresado en el Hospital de Navarra tuvo un síndrome confusional agudo, y mientras nos daban plaza en Josefina Arregui, nos derivaron al Hospital San Juan de Dios.
Cuando llegamos, nos dijeron que principalmente se preocupaban por el paciente y su familia. Ahí empezó mi sorpresa, y por eso le llamo del protocolo. Si el paciente se hace sus necesidades encima y llamas para cambiarlo, te dicen que por protocolo debes esperar a que atiendan a 40 pacientes restantes. Eso lo entiendo perfectamente, por lo cual yo les digo que me den un pañal, que yo misma le cambio y les ahorro un trabajo. Me contestaban que no me pueden dar el pañal, que tiene que esperar, cuando mi intención era la de ayudar.
Por protocolo tienes que esperar a que ellos puedan venir a levantarlo o acostarlo en la cama, porque tampoco te dejan hacerlo a ti. Incluso un día estuve esperando hora y media a que viniesen.
Por protocolo tienes que salir de la habitación para que lo acuesten, lo levanten, pase la enfermera, etcétera, cuando en el hospital siempre estabas en la habitación, sin sacarte al pasillo, y más en la situación que estaba mi padre.
Llegué incluso a oír cómo le decían a otro paciente: “No podemos estar todo el día pendientes”. El día que bajó a Rehabilitación me dijeron: “Es imposible hacer nada, tu familiar no va a recuperar ni la cabeza ni las piernas”. Imaginaos qué cara se me quedó. ¡Qué pena las instalaciones tan bien hechas para la atención tan desgradable que recibes!
¿Somos humanos o simples números? Si es un familiar de los que trabajan ahí ¿recibe el mismo trato? ¿No se supone que están para ayudar, tranquilizar y se sienta más cómodo el paciente y su familia? ¿Qué confianza te crea que te echen al pasillo? ¿Alguien permite ese trato a su familiar?
Reconocer que no todos nos daban el mismo trato. Se nota quién está por vocación. Animo a que escriba más gente con la que he hablado y también cuente sus horribles experiencias y así, ya que a nosotros nos ha tocado este trato, al que le toque ingresar no reciba un por protocolo.. .
Edurne Iriarte Gabarrús Hija de un paciente