Viñedos con historia
El documental navarro ‘Las podas olvidadas’ ha sido uno de los premiados en el festival francés Oenovideo, dedicado a la viña y el vino
SAN MARTÍN DE UNX – Un cortometraje documental cien por cien navarro, titulado Las podas olvidadas, ha sido uno de los proyectos premiados en la 25ª edición del Festival de Cine y Fotografía de la Viña y el Vino Oenovideo, celebrado recientemente en Épernay (Francia), ciudad que pertenece a la región de Champaña.
Producido por Julián Palacios Muruzábal (San Martín de Unx, 1974), ingeniero agrónomo y experto en viticultura, y Gonzaga Santesteban García (Burlada, 1975), doctor en Ingeniería Agronómica y profesor e investigador en la UPNA, y rodado por Irene Guede Arboniés (Pamplona, 1983), licenciada en Comunicación Audiovisual y especializada en Sumillería y Enomarketing (que es popularmente conocida como La Chica de la Garnacha), se trata de una historia sobre “viticultores románticos e irreductibles”. Estos residen en cuatro zonas muy diferentes, como son San Martín de Unx (Navarra), Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), Montilla (Córdoba) y Tudela del Duero (Valladolid), lugares que tienen en común un tipo de poda, basada en el respeto por la planta y en el cuidado de las corrientes de savia, que se realiza en unos viñedos que en muchos casos superan los 80 años de antigüedad, cuando hoy en día apenas llegan a los 20-25.
Es por ello que sus autores proponen echar la vista atrás y “redescubrir la diversidad de formas de poda casi olvidadas en las diferentes áreas de España” para asegurar la longevidad de las viñas. Porque aunque “en cada sitio se cultiva una variedad diferente, en Jerez por ejemplo la uva palo-
mino, en Montilla la Pedro Ximénez, en Navarra la garnacha y en Ribera del Duero la uva tempranillo, aunque los suelos y los climas son distintos y la forma de cultivar es diferente, los principios de la poda son los mismos”, señala al respecto.
En este sentido, Palacios explica que la idea de rodar este cortometraje surgió de forma casual. “Tengo una asesoría de viticultura (Viticultura Viva) que me permite moverme bastante y trabajar con diferentes bodegas y hace unos años pensé que sería buena idea organizar una jornada técnica de viticultura sobre cómo cuidar los viñedos para que vuelvan a vivir 100 años. Después de abordar el tema desde distintos puntos de vista, este año propuse en Laguardia (capital de la Rioja Alavesa) que se reflexionase sobre el diseño de viñedos longevos, siendo uno de los temas principales a tratar la poda, aprovechando que soy experto en la materia. Y es que es un tema que hace 10 años no le importaba a nadie, pero que ahora interesa mucho. De hecho, es primordial, ya que como dijo Lucio Junio Moderato Columela, escritor de Los doce libros de agricultura, en el siglo I: La poda es la labor más necesaria de todas las que nos proponemos dar a las viñas”, recuerda. “Para que la charla fuera más amena pensé en grabar algo con el móvil para después proyectarlo, pero tras hablar con Irene, decidimos rodar un documental de manera más profesional”, añade. La idea original era que el vídeo sólo se proyectase en Laguardia, pero tras recibir unas críticas inmejorables, decidieron mandarlo al Festival Oenovideo.
En total se presentaron 128 obras, de las cuales solo 38 (de 19 países) se seleccionaron para la sección oficial, resultando una de las galardonadas Las podas olvidadas. Los premios se entregaron en octubre en el Palacio de Luxemburgo de París, sede del Senado francés. “La verdad es que es alucinante. Estamos viviendo un sueño”, reconoce Palacios.
Tras el éxito cosechado, avanza que la intención es “seguir por la misma línea”, realizando otros proyectos audiovisuales similares, porque “nos hemos dado cuenta de que los técnicos comunicamos muy mal. Somos demasiado fríos y hay que apelar más al sentimiento para que el mensaje llegue a más gente”, indica.
El próximo reto es subtitular el documental al francés, portugués e inglés. En castellano ya se puede ver tanto a través de la web laspodasolvidadas.com como de www.julianpalacios.es. El 28 de diciembre se proyectará también en la Casa de Cultura de Olite. El 21 de noviembre se pudo ver, a su vez, en el Museo de Navarra. La cita resultó todo un éxito, llegando a completarse el aforo de su salón de actos.
Preguntado acerca de la muerte prematura de los viñedos debido a las enfermedades de la madera, Palacios achaca la situación a las prisas. “Ahora se practica una viticultura del siglo XXI, low cost. Se busca que cueste lo menos posible y que dé cuantos más kilos mejor. En definitiva, que sea rentable a corto plazo”, resume.
Sin embargo, “cuando una viña lleva 100 años en un campo es porque está bien adaptada a su entorno y eso le hace producir uva de mucha calidad. De hecho, las viñas más buscadas y la uva que más cara se paga en cualquier región es la de las viñas viejas”, señala.
En este sentido, aplaude el hecho de que poco a poco se esté optando por volver a los orígenes, por reivindicar la autenticidad y la identidad. “Ha habido unos años, en la década de los 90 y los años 2000, en la que la globalización ha hecho mucho daño. Parecía que todos íbamos a acabar vistiendo igual y comiendo lo mismo. En el vino hubo una corriente en la que lo importante era que los caldos tuvieran un gusto internacional y se plantaron variedades de fuera. Afortunadamente, eso está cambiando”, concluye. ●
“La viticultura actual es ‘low cost’; busca rentabilidad a corto plazo” JULIÁN PALACIOS Ingeniero agrónomo