‘DE LA PASTILLA A LA ZAPATILLA’, EL DEPORTE COMO FUENTE DE SALUD
El proyecto ‘De la Pastilla a la Zapatilla’, puesto en marcha por Huarte y Egüés, permite que personas mayores como Miguel Nieto, de 88 años, se acerquen al deporte como fuente de salud. Y con receta médica
Cuatro días por semana, a las ocho de la mañana, Miguel Nieto se presenta puntual en el Spa Sport de Itaroa Huarte con su mochila de deporte. “Los primeros días me decían que me iban a dar las llaves para que abriera yo”, se ríe este vecino del municipio de 88 años. Y explica el motivo de sus madrugones. “Yo es que soy antiguo. Cuando era crío en el pueblo había una charca, y las madres nos tenían dicho que hasta que no pasaran dos horas después de comer no nos podíamos meter en el agua, que se corta la digestión y te mueres. Me levanto a las seis y cuarto. Para las siete ya he desayunado, a las ocho estoy en las máquinas y a las nueve ya me puedo meter al agua sin miedo”, dice.
A Miguel nunca le ha faltado actividad. Antes de descubrir la sala de musculación y el spa, caminaba todos los días seis kilómetros y trabajaba duro en la huerta. “¡Qué remedio! Les dices a los nietos que cojan una azada y te preguntan dónde se enchufa...”. Ahora, además de caminar y cultivar, Miguel es habitual en un lugar que hasta hace bien poco le resultaba del todo ajeno. “No sabía ni dónde estaba esto. Tuve que venir preguntando, porque está escondido en este callejón. Y ya te digo, empecé a venir y no he parado. No, no. El primer día, cuando vine al mostrador, la chavala me preguntó cuántos años tenía. Le dije que 87 para 88 y no se echó a reír porque le daría vergüenza”, recuerda.
Los ayuntamientos de Huarte y el Valle de Egüés –posteriormente Esteribar se sumó a la iniciativa– pusieron en marcha el proyecto De la Pastilla a la Zapatilla a finales de 2016. La idea es que desde el Centro de Salud, en coordinación con el Servicio de Deporte, se recete precisamente eso: deporte. “La monitora me mandó unos cuantos ejercicios. En cada cacharra me puso 12 movimientos. Pero como ya he perdido la vergüenza hago 20 o 25. Los que me da la gana. Siempre me paso. Voy una pa’quí, otra pa’llí... no me importa”, confiesa Miguel. Y dice que se encuentra estupendamente. “He sentido mucha mejoría. Estoy muy bien. Ando mucho más fácil y más ágil”. Después de la sala de musculación, Miguel se pone el bañador... y al agua. “Me gusta un chorro fuerte en el que le pongo la chepa. Y la cama, que es muy buena y te da el agua en la tripa. También nado un poco, no mucho porque la piscina no da de recorrido, pero me muevo por todos lados”, afirma.
Junto a Miguel le pega a las máquinas Jesús Lasa, también vecino de Huarte, de 67 años. “Yo era escéptico con esto. Solamente había hecho ejercicio hasta la edad de la mili. Después nada de nada. Algún paseo que otro y punto. Me lo recomendó Maite, la médico, hará cosa de dos años. Y es una maravilla. No solamente en lo físico, sino en el equilibrio mental. Mejoras mucho en agilidad, te sientes con buen tono... Es un proyecto muy interesante y recomendable para todos aquellos que estén como mínimo en la edad de jubilación”.
“SON MUY APLICADOS” La monitora de sala Maider Larumbe explica que “cuando vienen, algunos se acaban de comprar las zapatillas y la pantaloneta. Y la mayoría vienen directamente vestidos de calle, no saben ni qué ponerse. Vienen muy perdidos”. Superados los apuros iniciales, después “son muy aplicados y los que mejor se portan. Y se enganchan. Generalmente los que vienen son muy constantes. Al final se manejan solos, y quieren más y más y más. No se quedan contentos con lo que les das. Eso nos gusta”, cuenta, y añade que el vínculo que se crea con todos “es muy bonito. Por ejemplo, vienen muchas mujeres que se han quedado viudas, y esto también les ayuda a relacionarse, crean aquí su grupo, su ambiente... Es muy positivo. Mejoran a nivel físico y mental”. ●
“He sentido mucha mejoría. Estoy muy bien, ando más fácil y más ágil” MIGUEL NIETO Vecino de Huarte de 88 años
“Era escéptico y solo había hecho ejercicio hasta la mili... pero es una maravilla” JESÚS LASA Vecino de Huarte de 67 años