La comisión Kitchen se cierra con Rajoy y Fernández Díaz
Un exjefe de la UDEF afirma que en 2012, tras llegar el PP al poder, fue cesado “por investigar la Gürtel”
MADRID – El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy será el último compareciente en la comisión parlamentaria sobre la operación Kitchen, precedido por el exministro del Interior Jorge Fernández Díaz, la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal y su marido, Ignacio López del Hierro.
La Mesa de la comisión que investiga el presunto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas ha decidido que se cierre el 10 de junio con los testimonios de Fernández Díaz y de Rajoy.
Previamente, uno de los momentos más esperados de la comisión tendrá ocasión el jueves 27 de mayo con la citación del principal imputado en este caso, el excomisario José Manuel Villarejo. Ese mismo día y en un turno anterior, comparecerá José Antonio Nieto, el secretario de Estado de Seguridad que relevó a Francisco Martínez. Martínez, también imputado, está citado el 1 de junio, el mismo día que el entonces director general de la Policía, Ignacio Cosidó.
El miércoles 2 de junio declararán Ignacio López del Hierro y María Dolores de Cospedal.
CESE Mientras, el exjefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) José Luis Olivera afirmó ayer que en 2012, tras llegar el PP al Gobierno, le cesaron de ese cargo “por investigar la Gürtel” y ha negado que él haya beneficiado al Partido Popular ni a “ningún partido”.
“Yo no he encubierto la Gürtel, he sido la apisonadora de la Gürtel”, ha dicho el comisario en la comisión de investigación del Congreso de la Operación Kitchen, supuestamente urdida en 2013 por el Ministerio del Interior de Jorge Fernández Díaz para sustraer información al extesorero del PP Luis Bárcenas.
Olivera explicó que en 2012 su superior le cesó y le ofreció varios puestos, como la comisaría de Tarragona y varias jefaturas, a las que dijo que no porque lo que quería, afirmó, “era seguir en la UDEF”.
A finales de junio de ese año, con mucha “presión” en la cabeza de aceptar un cargo, le ofrecieron dirigir el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco), y finalmente accedió porque creía que, si no, le iban a echar de todas maneras, pero no le gustaba.