La cifra de refugiados ucranianos podría duplicarse si se agrava la guerra
Navarra ha acogido a 1.550 desde que se iniciase la invasión en el país
PAMPLONA – La cifra de ucranianos refugiados en Navarra, que actualmente es de 1.550, podría duplicarse en función de la evolución de la guerra, según reconoció ayer el consejero de Políticas Migratorias y Justicia, Eduardo Santos, que compareció en comisión parlamentaria para actualizar los datos de personas acogidas desde que comenzase una guerra que condenó “rotundamente”, para calificar después de “dictador” a Putin y realizar un llamamiento para que “pare la guerra y se juzgue a los responsables de la misma”.
En total, a la Comunidad Foral han llegado 1.550 personas –de las que 1.200 han recibido formalmente protección temporal–, lo que ha duplicado el número de personas de ese país, una población que antes de la guerra era de 1.711.
Desde un primer momento, y según aseguró Santos, “la principal preocupación era la búsqueda de recursos de alojamiento”, un problema que se solventó gracias a ofrecimientos en domicilios particulares (un 94% de ellos sin vinculación con Ucrania), hogares de familiares y allegados, así como alojamientos comunitarios como el Albergue Alsasua, con 72 plazas; la Residencia Fuerte Príncipe, de Pamplona, con 10; el Ayuntamiento de Valtierra, que ha ofrecido 7; el de Pamplona, con 45; Capuchinos de Pamplona, con 12, Agustinos, en Arbeiza, con 60; Jesuitas, en Tudela, con 28, y Luis Amigó, en Mutilva, con 20; a lo que se añade Nasuvinsa con cesión de viviendas en alquiler. Por todo ello, “no se ha detectado a ninguna persona procedente de Ucra
nia que haya tenido que dormir en la calle ni un solo día”, resaltó el consejero.
Asimismo, en la Oficina de Atención a la Emergencia en Ucrania, que se puso en marcha el pasado 7 de marzo, se han realizado 3.431 atenciones a personas ubicadas en 68 municipios. Del total, 2.406 han sido demandas, atendidas en un 98%, y el resto ofrecimientos de la ciudadanía. La mayor parte de las demandas, un 64%, han sido para conocer los trámites para la protección temporal que les otorga permiso de trabajo y residencia, y un 45% han pedido ayudas o prestaciones de distintos tipos, como alojamiento, manutención, escolarización, empleo, aprendizaje idioma, vivienda o ayuda psicológica.
En el caso de los ofrecimientos hubo 725, lo que demuestra una “ejemplar solidaridad” del pueblo navarro con el país. De esa cantidad, dos terceras partes fueron para ofrecer acogida en domicilios, un 10% de voluntariado, un 8% donaciones, un 6% transporte y el resto, de trabajo.