Flojo pistoletazo de salida
La tradición qatarí y la modernidad se mezclaron en la ceremonia de inauguración del Mundial 2022, en el estadio Al Bayt de Al Khor, una de las joyas arquitectónicas erigidas para albergar la competición y escenario del primer partido. Bajo la presidencia del emir Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani, aclamado por el público, el primer Mundial
de la historia en Oriente Medio exhibió una ceremonia rápida, de media hora, en la que se mostraron las raíces del país, su vinculación al desierto, y se quiso mandar un mensaje de unidad y de modernidad. La ceremonia fue muy floja, muy fría, con escasa presencia femenina. En la imagen, la mascota del Mundial, La’eeb, sobrevuela una de las actuaciones.