Podemos arropa a Montero y defiende su labor en Igualdad
La ministra recibe el apoyo de Zapatero y de dirigentes de la izquierda
– La ministra de Igualdad, Irene Montero, volvió ayer a defender la ley del solo sí es sí porque protege a todas las mujeres que sufren violencias sexuales, y demandó unidad del feminismo ante la “violencia política” que “no va a parar”, porque “no es una bronca” sino la “estrategia de la derecha política, judicial y mediática” para frenar los avances del Gobierno de coalición.
Así lo trasladó durante el acto Con todas. Por todas, organizado por Podemos en Madrid para arropar a la titular de Igualdad, tras el ataque personal que lanzó Vox en el Congreso y la “cacería” contra ella por la polémica por la reducción de penas a condenados tras la entrada en vigor de la ley.
Un respaldo al que se sumaron también el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero y la exdiputada del PSOE en Madrid Carla Antonelli, cargos de IU y el exvicepresidente Pablo Iglesias, presente entre el público.
Un día después del 25-N y de la manifestación convocada en Madrid con presencia de ministras del PSOE donde se escucharon gritos que pedían su dimisión, la ministra apeló a la necesidad de que todas las feministas, pese a la diversidad e incluso discrepancia que presenta el movimiento, estén “juntas y unidas para defender el avance” de derechos.
“La violencia política es una estrategia para que dudemos de nosotros mismas, las unas de las otras, para no generar redes de confianza, de alianzas. Por eso es importante que compañeras usen su poder para alzar la voz y defender las conquistas del feminismo”, apeló Montero durante su intervención.
Asimismo, citó la necesidad de terminar la legislatura con la aprobación de proyectos como la ley trans y la reforma de la del aborto, a la vez que recalcó que la normativa del solo sí es sí es “sólida” y debe ser aplicada correctamente por los jueces, porque protege a todas las
MADRID
víctimas violencias sexuales (algo que ocurre en nueve de cada diez casos).
Es más, Montero defendió que esa campaña de “violencia política” busca “destruirla” a ella y a otras dirigentes, como las exministras del PSOE Bibiana Aído y Leire Pajín, porque no se limita al “insulto” sino que es un plan de sus adversarios para frenar al conjunto del feminismo y disciplinar a sus dirigentes, en lo que también ha caído la “progresía mediática”.
La prueba de ello, desgranó Montero, es la “reacción de la extrema derecha” y del PP, que sobre el incidente de Vox dijo que “quien siembra vientos recoge tempestades”. Recordó que “no es la primera ni será la última vez” que padece esa campaña, para rememorar las represalias durante el franquismo a las mujeres de izquierda. “Los adversarios no van a parar”, reiteró.
VOX VUELVE A ATACAR
Por su parte, en la ultraderecha no cejan en sus ataques a la dirigente de Podemos. Ayer, el presidente de Vox, Santiago Abascal, afirmó que la “inmensa” mayoría de los españoles y “la mitad de Podemos” piensa lo mismo que la diputada de su partido Carla Toscano sobre la ministra de Igualdad, Irene Montero. Añadió que se alegra de que el Gobierno haya mostrado unidad en torno a la dirigente morada porque, de esta forma, se han retratado “junto a lo peor de la política española”.
Así se expresó en una entrevista en esradio en relación con los insultos machistas de Toscano, que afirmó en el Pleno del Congreso que el único mérito de Montero es “haber estudiado en profundidad” a su marido y exlíder de Podemos, Pablo Iglesias. “Esta semana en el Parlamento hemos visto cómo una diputada, por decir lo que piensa la inmensa mayoría de los españoles y la mitad de Podemos, fue atacada con saña”, criticó Abascal.