Diario de Noticias (Spain)

Críticas de cine

- Juan Zapater POR (www.ghostinthe­blog.com)

Vanessa Filho, como la propia autora de la novela en la que se basa el filme, Vanessa Springora, procuren mantener una prudente serenidad. Envuelto en papel de seda para reforzar el horror del monstruo que lo habita, el filme reprime la hipérbole, evita el panfleto, lo obvio, y elude lo más escabroso. Filmada con alta profesiona­lidad, interpreta­da con brillantez y convicción, especialme­nte por parte de Kim Higelin, la actriz que interpreta el alter ego de Springora, y adobada con ese toque de fría sensualida­d e impecable precisión con la que cierto cine francés muestra las relaciones sexuales, El consentimi­ento da lugar a un texto del que se desprender­án no pocos debates. De hecho, su antagonist­a, excelente la encarnació­n de Jean-paul Reouve como Gabriel Matzneff, sigue apareciend­o como un referente del último velo que protege a ese viejo mundo inclinado a justificar los excesos machistas; y los usos y abusos sexuales de una concepción que convierte a la mujer en ese oscuro objeto de deseo.

A Buñuel parece encomendar­se Vanessa Filho para desentraña­r los recovecos crueles que adornan una personalid­ad, la del citado Matzneff y a la propia autora del relato medieval de La bella y la bestia. Datado a mediados del siglo XVII y recopilado por el gran recopilado­r, Charles Perrault, se sabe que esa fábula de ambiguo significad­o hunde sus raíces en El asno de oro de Apuleyo (125 d.c. – 170 d.c.). Con permiso de Perrault, serían dos mujeres, en el siglo XVIII, Madame de Villeneuve y Madame Leprince de Beaumont, quienes más contribuye­ron a la divulgació­n de esta alegórica narración. En ella, con ella, se escenifica con inquietant­e delectació­n, la vulnerabil­idad de una niña deslumbrad­a por el apetito y la vanidad de un presuntuos­o y amanerado epígono de Lewis Carroll. Entre el autor de Alicia en el país de las maravillas y el Marqués de Sade, la figura de esa bestia se antepone a la de su víctima, una caperucita roja que, tras años de convivir con una herida abierta, decide conjurar su dolor pagando al monstruo con sus mismos argumentos: la literatura. El poder del relato. Relato que a través de Filho se hace cine y de lo que aquí ahora nos ocupamos.

De eso va esta inquietant­e, perturbado­ra y polémica obra, del poder sanador de la madre de todos los relatados: el cuento. Vanessa Filho refleja la manipulaci­ón sexual y proyecta la culpabilid­ad de una sociedad intelectua­l decadente y amoral. Tan culpable es la bestia como quienes le ríen las gracias y premian sus abusos. En el tiempo del sí es sí, esta película impone otro matiz, hasta dónde y desde cuándo podemos definir como libre ese consentimi­ento.฀●

 ?? ?? Kim Higelin, la joven protagonis­ta de este relato de coacción sexual y abuso, transmite una sensación de verosimili­tud y autenticid­ad a su frágil y vulnerable personaje.
Kim Higelin, la joven protagonis­ta de este relato de coacción sexual y abuso, transmite una sensación de verosimili­tud y autenticid­ad a su frágil y vulnerable personaje.
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain