Llarena da un revés a Puigdemont al suspenderlo de diputado por rebeldía
El juez del Supremo confirma el delito del ex presidente catalán y otros cinco procesados El ‘Govern’ denuncia que la medida judicial pretende “alterar las mayorías” del ‘Parlament’
La Justicia va por su camino y el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena no entiende de cambios de gabinete en La Moncloa a propósito de los presos procesados por el conf licto catalán. El juez suspendió ayer cautelarmente a seis de los diputados catalanes que se encuentran encarcelados o que pesa sobre ellos una orden de detención e ingreso en prisión por un delito de rebelión. El magistrado, que ha completado ya la fase de instrucción, adopta esta decisión después de que la sala de Apelación del Alto Tribunal confirmara el procesamiento por este delito.
En un auto hecho público ayer, Llarena comunicó la suspensión de las funciones como diputado del ex president Carles Puigdemont y de otros cinco procesados por rebelión que se encuentran en prisión provisional: Oriol Junqueras, Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva y Jordi Sánchez. “Esta decisión describe el nivel de calidad democrática del Estado. El voto de los ciudadanos, maltrecho por una Justicia que continúa haciendo política. Será largo pero ganaremos”, criticó Puigdemont en Twitter.
“Concretamente hay un apartheid contra políticos escogidos democráticamente y que somos suspendidos de manera arbitraria por un juez”, añadió Puigdemont en relación a unas declara- ciones de la candidata a la Presidencia del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, quien recalcó a Pedro Sánchez que no valen los “apaciguamientos” con quienes practican el “apartheid”.
Entretanto, el Govern denunció ayer que la suspensión decretada por Llarena pretende “alterar mayorías” en la Cámara regional, mientras que JxCat pidió que sea el Parlament quien decida si apli- ca esa suspensión. Si bien el president, Quim Torra, salió el lunes de La Moncloa satisfecho por haber podido al menos hablar con el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, del conflicto catalán desde la política, pese al desacuerdo sobre el procés, ayer los soberanistas recibieron un revés por parte de Llarena, quien terminó la instrucción y declaró en rebeldía a los procesados que se encuentran huidos, incluido Puigdemont, que serán investigados en otra pieza separada.
Unos minutos antes de conocerse la decisión judicial, la consellera y portavoz del Govern, Elsa Artadi, ya había denunciado un interés en “seguir alterando las mayorías parlamentarias que surgie- ron de las urnas el 21-D” a través de la suspensión de los diputados soberanistas. Fuentes del Ejecutivo catalán indicaron que ven esta decisión de Llarena como “una nueva vulneración de los derechos de los diputados” afectados. Las mismas fuentes subrayaron además que sólo demuestra que “no se respeta el resultado de 21D”, elecciones en las que los soberanistas obtuvieron mayoría absoluta en el Parlament.
Desde los grupos soberanistas, JxCat defendió que el pleno del Parlament es quien debe “decidir” si suspende de cargo público a Puigdemont y a los cinco otros diputados, y dejó claro que “en ningún caso” su grupo pedirá a sus parlamentarios que “renuncien”.
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