Acuerdo para un canje de presos entre Gobierno y rebeldes yemeníes
La guerra se generalizó en marzo de 2015 con la intervención de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí
El Gobierno yemení y el movimiento rebelde hutí abrieron ayer en Suecia las primeras consultas de paz en dos años y medio anunciando un acuerdo para canjear presos entre los dos bandos enfrentados desde 2014.
El anuncio lo hizo el enviado de la ONU para Yemen, Martin Griffiths, en el acto de apertura de las conversaciones, auspiciadas por Naciones Unidas y que se desarrollan en el castillo de Johannesberg, en Rimbo, al norte de Estocolmo.
El futuro de Yemen está en nuestras manos; actuemos ahora antes de perder el control”
“Estoy feliz de anunciar la firma de un acuerdo de intercambio de presos, detenidos y personas en arresto domiciliario”, dijo Martin Griffiths, que habló de “buena señal” que espera que sirva para crear un marco de negociaciones políticas entre las dos partes.
El inicio de los contactos supone un “hito importante” que muestra que las partes quieren encontrar una solución pese a los retos y cuestiones conf lictivas, sostuvo Griffiths, quien reveló que en Suecia se discutirán temas económicos, la reducción de la violencia, el acceso huma- nitario y la situación del aeropuerto de Saná.
El enviado de la ONU, que agradeció a las partes que hayan rebajado los enfrentamientos en las últimas semanas, dijo no querer ser “demasiado optimista” pero sí muy ambicioso”.
“El futuro de Yemen está en las manos de quienes estamos en esta sala. Debemos actuar ahora antes de perder el control sobre el futuro”, dijo Griffiths, quien estuvo acompañado por la ministra de Asuntos Exteriores sueca, Margot Wallström, y las dos delegaciones, sentadas frente a frente en una mesa rectangular en la cita de Copenhague.
Wallström se mostró “orgullosa” del paso dado por las partes, pero recordó que hay una “catástrofe” en Yemen que hay que frenar y que los yemeníes han esperado “demasiado” por la paz.
“Ahora es cosa vuestra comprometeros de verdad de forma constructiva y en buena fe. Vuestro futuro está en vuestras manos”, afirmó Wallström, que habló de la necesidad de que haya “concesiones, compromisos y coraje” y de tener expectativas “realistas”.
La guerra en Yemen comenzó a finales de 2014, cuando los hutíes, que cuentan con el respaldo de Irán, se hicieron con el control de Saná, y el conf licto se generalizó en marzo de 2015 con la inter vención de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí, a la que suministran armas Estados Unidos y otros países occidentales.