La región se encamina a la primera caída de las exportaciones desde 2015
Registra un buen noviembre, pero las ventas siguen en negativo en el cómputo anual La caída de las importaciones mejora el superávit
Noviembre fue un buen mes para las exportaciones andaluzas. La región vendió bienes por un valor de 2.525 millones, un 4,6% de alza con respecto al mismo mes del año anterior. Se trata del primer incremento tras seis meses consecutivos, desde mayo, con tasas mensuales negativas.
Esa circunstancia había llevado a que el cómputo anual se situara en negativo en la primera mitad de año. Y sigue así, pese al repunte de noviembre. El valor exportado ascendió, entre enero y noviembre, a 29.026 millones de euros en el penúltimo mes del año, un 1,8% menos que en el mismo periodo del año anterior. Es cierto que el retroceso se ha atenuado respecto al 2,5% de caída que se registraba en octubre y que Andalucía sigue siendo la segunda comunidad exportadora (con un 10,8% de cuota) pero la realidad es que mientras las ventas a nivel español crecen las del sur retroceden. Hasta el punto de que la comunidad, para alcanzar los 32.439 millones de 2018, récord histórico absoluto, tendría que incrementar las ventas en diciembre un 22,9% interanual, algo bastante improbable.
La razón del peor comportamiento exportador aquí estriba, entre otras cosas, en el mayor peso de la venta de refino de crudo y materias primas. Especialmente estas últimas se desploman un 22,7% en el caso de los minerales, un 25% en el del cobre y un 16% en el del hierro y el acero. El petróleo, sin embargo, sólo desciende un 2,5% gracias al aumento de en los últimos meses de su precio
Respecto al resto de sectores, los alimentos siguen con sólidos crecimientos, con el lunar del aceite de oliva, que registra una leve caída del 3%, y la aeronáutica coge velocidad de crucero tras los fuertes incrementos de los últimos años.
Otra buena noticia es que el superávit comercial se sitúa en 1.216 millones, frente al déficit del año pasado, gracias a que las importaciones caen un 6%, lo que indica menos necesidad de comprar en el exterior por parte de la región.