La posible suspensión de la comisión de la Faffe divide a PP y Ciudadanos
Los populares abogan por paralizar la investigación para dotar de mayor eficacia al órgano, que no funciona como debería
La comisión de investigación sobre la Faffe, la extinta Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo, ha dividido a sus principales impulsores, PP y Ciudadanos. Los socios del Gobierno andaluz presionaron al final de la pasada legislatura para impulsar esta investigación en la Cámara andaluza. Tanto se empeñaron que el compromiso fue reactivar el órgano parlamentario en los primeros cien días de su acción de gobierno. Populares y naranjas cumplieron su promesa, pero desde entonces la comisión no hace otra cosa que descarrilar.
La última muestra es que PP y Cs discrepan en la fórmula para reactivarla tras el bache de las comparecencias de ex altos cargos del PSOE fijadas durante la campaña del 10-N. El portavoz popular, José Antonio Nieto, sugirió hace unos días que lo mejor será paralizar la investigación para cambiar las normas que la regulan y así dotarla de mayor efectividad. La portavoz de Cs en la comisión, Teresa Pardo, no cree que sea necesario bloquear el proceso para mejorar al funcionamiento de las investigaciones parlamentarias.
El PP contará, presumiblemente, con el apoyo de Vox –“las comisiones de investigación no sirven para nada”, dijo ayer Ángela Mulas– y, quizás, de Adelante Andalu
cía, que respaldará al PP si la reforma se hace “en aras de la transparencia”, según especificó Ignacio Molina. Junto con Ciudadanos, los socialistas tampoco están por la labor de parar la comisión sobre la Faffe. “Es una charlotada ”, expresó ayer el portavoz del PSOE en la comisión, Rodrigo Sánchez Haro.
Las comisiones de investigación están reguladas muy vagamente en el reglamento del Parlamento, texto que Marta Bosquet, presidenta de la Cámara, aspira a reformar en esta legislatura. Las investigaciones como la de la Faffe se articulan por medio de una resolución, que es lo que deberá reformarse para cambiar la fórmula actual. José Antonio Nieto, entre los posibles cambios, aludió a la prohibición de fijar comparecencias en campaña electoral. Fue esta situación la que detonó el conflicto al no declarar el ex presidente Manuel Chaves y los ex consejeros Javier Carnero, Antonio Ramírez de Arellano y José Sánchez Maldonado. También eludieron el paseíllo Susana Díaz, José Antonio Griñán y María Jesús Montero.