Los despachos esperan una avalancha para pedir ERTE a partir del próximo lunes
Los asesores recomiendan el recurso de la suspensión del contrato por fuerza mayor
Ya hay clientes que han acudido para asesorarse e iniciar suspensiones de contratos. Lo confirman los despachos de abogados sevillanos consultados a raíz de las últimas novedades en la crisis del coronavirus. Muchas empresas, sobre todo el ámbito turístico y de servicios, hace días que han dejado de ingresar dinero y el estado de alarma anunciado ayer ha sido el rejón decisivo para que algunos empresarios quieran adelantarse y optar por cerrar sus negocios, al menos temporalmente.
Esta inquietud empresarial quedó patente en la junta directiva de la Confederación de Empresarios de Sevilla, que ayer fue asesorada por Sanguino Abogados. Los despachos están recibiendo una avalancha de peticiones para iniciar expedientes de suspensión (ERTE) por la crisis del coronavirus. La mayor urgencia es de las pequeñas empresas, que no tienen capacidad financiera para sostener los salarios ante la caída de la actividad y que se ven abocadas a cerrar.
Decisiones que no tienen espera y que se chocan con la lentitud de los procedimientos legales: plantear un ERTE implica de tres o cuatro semanas con la legislación actual, pero las circunstancias actuales conducen a muchos empresarios a querer cerrar sus negocios este mismo lunes.
Desde Sanguino Abogados es ha recomendado a las distintas patronales del turismo, donde la precupación es mayor, recurrir a otra figura legal ya prevista: la suspensión del contrato de trabajo por fuerza mayor temporal. Este procedimiento se inicia a petición de la empresa, que se dirige a la autoridad laboral competente al mismo tiempo que informa, no negocia, con los representantes legales de los trabajadores. Y ésta, tras recabar los informes que estime necesarios, dicta la resolución en el plazo máximo de cinco días. Es, por tanto, la vía más rápida.
Según los abogados consultados, la avalancha de peticiones que esperan recibir los despachos no sólo se argumentan por la caída de las ventas y los ingresos, también por seguridad de las propias empresas, que quieren prevenir riesgos y adelantarse a situaciones como las que están viviendo ya los hosteleros y comerciantes de Madrid, obligados a cerrar.
Esta semana, los empresarios y los sindicatos han presentado al Gobierno una serie de medidas extraordinarias para afrontar la situación. Entre ellas se aborda la necesidad de simplificar los procedimientos y acortar los plazos de los ERTE, así como el aplazamiento del IVA y de las cuotas de la Seguridad Social y la implantación de créditos sin intereses y devolución en seis meses, entre otras medidas, pues las ya anunciadas por el Gobierno han sido calificadas como insuficientes.