Trump declara la emergencia nacional y acelera las pruebas
● Irán recurre a las Fuerzas Armadas para “despejar tiendas y calles” ● Un estudio sitúa el primer contagio en noviembre
El presidente de EEUU, Donald Trump, declaró ayer una emergencia nacional debido al coronavirus, una medida que permitirá desbloquear hasta 50.000 millones de dólares en fondos federales para ayudar a los estados y localidades del país a combatir la enfermedad.
“Para dar rienda suelta al poder del Gobierno federal, hoy declaro una emergencia nacional”, dijo Trump durante una rueda de prensa.
El Gobierno norteamericano aceleró ayer su capacidad de poder hacer pruebas médicas para detectar el coronavirus ante las críticas por la escasez de test y el temor de que las personas contagiadas sean muchas más de las cifras oficiales de 1.629 afectados y 41 muertos por el Covid-19.
Por su parte, Irán denunció ayer “el terrorismo médico” de EEUU, que mantiene sus sanciones pese a la crisis desatada por el coronavirus en el país persa, donde hasta ahora han fallecido 514 personas de los 11.364 casos de contagio.
Según informó ayer el Ministerio de Salud de Irán, en las últimas 24 horas se confirmaron 1.289 nuevos casos de contagio, de los que 85 perecieron, el número más alto desde que comenzó el brote hace tres semanas. El país recurrirá a las Fuerzas Armadas para “despejar de gente las tiendas, calles y carreteras” del país
El portavoz de Exteriores, Abas Musavi, dijo que el personal médico de Irán es “el más eficiente y valiente del mundo” por lo que no necesitan doctores estadounidenses, en respuesta a una sugerencia de Trump. “En lugar de la compasión hipócrita, detenga el terrorismo económico y médico para que los medicamentos y los equipos médicos lleguen al pueblo de Irán”, escribió en Twitter.
Por otro lado, una investigación del periódico hongkonés South China Morning Post basada en datos gubernamentales asegura que el primer contagio conocido de Covid-19, la enfermedad causada por el coronavirus SARS-CoV-2, tuvo lugar el 17 de noviembre.
Pekín aseguró ayer que la mayoría de las empresas chinas han reanudado la actividad, fuera del foco de Hubei, pese a que las drásticas medidas impuestas siguen vigentes y gran parte de la población continúa encerrada en sus casas.
Teherán denuncia el “terrorismo médico” de EEUU por mantener sus sanciones