La reapertura examina a EEUU, que ronda los 100.000 muertos
Las restricciones, incluidas las de las playas, se suavizan en varios estados por el puente festivo y la cercanía de la temporada estival
El avance de la reapertura tras la cuarentena por el coronavirus estaba bajo prueba en Estados Unidos este fin de semana largo por la celebración, ayer lunes, del Día de los Caídos ( Memorial Day), en el que distintos estados, además de reducir las restricciones en las playas, permitieron otras actividades, aunque bajo ciertas condiciones.
En momentos en que el país se acerca a las 100.000 muertes y se mantiene al frente de las estadísticas mundiales de contagios de Covid-19, los estadounidenses se preparan para una temporada de verano, cuyo inicio tradicionalmente lo marca el descanso del Memorial Day.
El domingo, Donald Trump y varios de sus funcionarios volvieron a cargar contra el Gobierno chino por la pandemia. El presidente ratificó sus acusaciones de que el coronavirus salió de China e insistió en que pudo haber sido detenido. “Ahora es algo muy terrible y podrían haberlo detenido si hubieran querido”, agregó el gobernante, para quien o fueron incompetentes o no quisieron detener la propagación de la enfermedad.
También el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Robert O’Brien, se refirió al tema al ser entrevistado en el programa Face the Nation, en el que indicó que “este fue un virus desatado por China” y se ocultó.
O’Brien, quien desde septiembre pasado reemplazó al polémico John Bolton, anticipó que la Administración preparaba una restricción para los viajes desde Brasil, el país de Suramérica más afectado por el Covid-19.
Poco después la Casa Blanca confirmó la medida, que afecta a viajeros, pero no al f lujo comercial entre ambos países.
Deborah Birx, una de las líderes del grupo de trabajo de la Casa Blanca contra el coronavirus, insistió este domingo en la necesidad de mantener el distanciamiento social, al advertir sobre el peligro de la “propagación asintomática” de la enfermedad.
“El distanciamiento social es absolutamente crítico”, declaró Birx durante el programa dominical This Week, en el que recomendó el uso de una mascarilla en los casos en que no se pueda mantener la distancia recomendada.
Birx, quien ha aparecido con mascarilla en algunas de las conferencias de prensa junto al presidente Donald Trump, no se aventuró a predecir un nuevo confinamiento, al asegurar que “es difícil saberlo”.
Sin embargo, admitió que se están aprovisionando de equipos de protección y respiradores, a la vez que se avanza en la búsqueda de una vacuna, por “si el virus regresa de manera significativa”.
El uso de mascarilla o cualquier cobertor facial ha sido una de las recomendaciones de las autoridades de salud que, sin embargo, tanto el presidente Trump como su vicepresidente, Mike Pence, se niegan a seguir en público.
El pasado fin de semana, el condado de Los Ángeles, en California, ensayó algunas medidas para suavizar el confinamiento, entre ellas la apertura de los senderos para ciclistas en las playas, en las que desde el pasado 13 de mayo se permite nadar, surfear, correr y caminar, aunque no están autorizadas las reuniones u otros eventos.
The Washington Post difundió ayer un vídeo publicado en Twitter en el que un grupo numeroso de personas departe en el Lago de los Ozarks sin atender las recomendaciones de distanciamiento social.
EEUU registra ya 1.639.872 casos y 97.599 muertes.
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