Las gradas de los héroes
La primera línea de la batalla sanitaria inaugura hoy el regreso del público al plató de ‘El Hormiguero’, que arranca la semana con Omar Montes
C. A.
El Hormiguero regresa hoy a la “nueva normalidad”. El espacio que dirige y presenta Pablo Motos recupera esta noche la presencia de público en plató, una ausencia que se remonta a la misma semana en la que el Gobierno español decretó el Estado de Alarma. El formato de 7 y Acción ha adoptado las medidas de seguridad, de tal manera que se completará solo un tercio del aforo disponible, todos los asistentes mantendrán la distancia de seguridad y se les tomará la temperatura antes de entrar en las instalaciones del espacio de Antena 3. Los invitados de la grada de esta noche tienen muy presente la relevancia de estas normas, ya que son miembros del personal sanitario que ha combatido en primera línea contra la COVID-19.
Médicos, enfermeros, auxiliares de enfermería y celadores, entre otras profesiones ligadas al ámbito de la salud, serán protagonistas de un pase muy especial, igual que lo fue el 19 de marzo cuando el conductor valenciano se enfrentó al primer programa con un plató desangelado. “Os confieso que me resulta bastante raro. Desde hace 14 años siempre ha habido público en esta grada y es la primera vez que me enfrento a un programa así”, señaló Motos, antes de adentrarse en un monólogo sobre el miedo, ese común denominador para los que estaban delante y detrás de las pantallas.
También supondrá el regreso de los invitados. Omar Montes, cantante, representante del géro trap en nuestro país y estrella televisiva tras convertirse en ganador de Super vivientes (Telecinco), será el encargado de inaugurar esta nueva etapa. El joven madrileño, envuelto en la polémica por participar supuestamente en una fiesta en la que había más de 100 personas, ha vuelto a arrasar en Spotify con su último éxito, Tinder.
Una emergencia sanitaria de este calado exigía una metamorfosis rápida y efectiva. Con el margen escaso de una semana en la que los informativos ocuparon casi todas las franja horarias, el programa de entretenimiento transmutó a una versión emergencia, con una parte mínima del equipo en el set de la calle Alcalá, y sin renunciar al peso de los invitados, pero por videoconferencia, una nueva manera de entrevistar, convertida en la gran tendencia de este extraño 2020. “Vamos a intentar estar ahí, donde tenemos que estar, acompañando a todos pase lo que pase”, dijo Pablo antes de enfrentarse a un plató vacío, con gran parte de sus secciones estrella fuera de la escaleta y sin un invitado cómplice.
Pese a la siempreafilada crítica de las redes sociales, el programa líder de la cadena privada ha sabido encontrar esa fórmula en tiempos deficitarios y no perder la fidelidad de esos dos millones y medios de acérrimos seguidores del programa. La mesa de debate, en la que participan algunos de sus colaboradores como Nuria Roca, Luis del Val, Cristina Pardo, Luis Piedrahita y un Monaguillo en estado de gracia, ha supuesto un acierto, que ojalá perdure cuando la normalidad no sea algo insólito.
Desde finales de mayo, la desescalada televisiva es un hecho. Espacios como Late Motiv o La Resistencia, ambos de Movistar+, Operación Triunfo, Zapeando, El Chiringuito o El Intermedio regresaron a su localización de cartón piedra habitual. Los concursos de tira diaria como Saber y ganar, ¡Ahora caigo!, ¡Boom! y La ruleta de la suerte, entre otros, pusieron en marcha de nuevo la maquinaria de grabaciones, así como muchas de las series, que se vieron obligadas a parar en seco hace tres meses. Entre los últimos en sumarse, programas de largo recorrido de TVE como Corazón y Flash moda, que regresaba el pasado sábado coincidiendo con su octavo aniversario. Los seguidores de Tu cara me suena, la gran apuesta de entretenimiento de la cadena de San Sebastián de los Reyes, esperan reencontrarse pronto con la emisión regular de la octava temporada, suspendida temporalmente y sustituida con refritos de anteriores ediciones.
No obstante, son muchos los que mantuvieron su dinámica de emisión como El programa de Ana Rosa, Sálvame, las galas de Supervivientes, Ya es mediodía, La última cena, Todo es mentira, Cuatro al día y Sálvame deluxe con sus gradas vacías. El grupo Mediaset es el que menos ha variado su parrilla, con su reality estrella en pantalla pese a la incertidumbre de tener a un enorme equipo al otro lado del charco en medio de la peor pandemia que ha vivido el planeta en los últimos cien años. Esta apuesta por el entretenimiento ha contribuido a su liderazgo absoluto también durante los momentos más amargos del aislamiento, con índices de consumo televisivos que también quedarán para la historia de la industria audiovisual.
El espacio de Antena 3 encuentra una fórmula y se reinventa tiempos de mínimos