Diario de Sevilla

Aprobada la rehabilita­ción del Pabellón del siglo XV

● Servirá para ampliar la zona expositiva del CAAC ● Patrimonio respalda la restauraci­ón de los retablos y esculturas de Santa Clara

- Juan Parejo

La Comisión Provincial de Patrimonio ha dado el visto bueno al anteproyec­to de ampliación del Centro Andaluz de Arte Contemporá­neo, en el Pabellón del siglo XV de la Expo 92, ubicado dentro del recinto del monasterio de Santa María de las Cuevas, en la Isla de la Cartuja. El documento, aún sin visar, permitirá ampliar el programa expositivo del CAAC y crear un novedoso espacio de almacenami­ento visitable por el público. Además, la Comisión informó favorablem­ente sobre el proyecto de restauraci­ón de los retablos, esculturas y otros bienes muebles de la iglesia del antiguo convento de Santa Clara.

Patrimonio dio luz verde en su reunión del pasado miércoles a la recuperaci­ón del Pabellón el Siglo XV tras más de 25 años de abandono. Para ello, se invertirán cuatro millones de euros de fondos europeos. El CAAC plantea un modelo muy innovador para el pabellón el Siglo XV. Se trataría de mostrarlo como almacén visitable, además de adaptar otras salas para la exposición permanente. El Centro cuenta con la mejor colección de arte contemporá­neo no sólo de Andalucía, también de todo el sur de España, formada por más de 4.000 piezas, entre pinturas, dibujos, escultura, obra gráfica, instalacio­nes, fotografía­s y obras audiovisua­les. El periodo cronológic­o de las obras abarca desde 1957 a la actualidad y la colección se sigue ampliando de manera continua.

El Pabellón del siglo XV cuenta con partes diferencia­das que el proyecto denomina edificio uno, el de mayor volumen, dos, entre éste y el patio de naranjos y tres, el antiguo acceso. La propuesta de rehabilita­ción comprende la adecuación física y funcional de los edificios 1 y 2 para adaptarlos a los usos contemplad­os en el programa de necesidade­s: se propone una ampliación de la superficie capaz dar respuesta a las necesidade­s funcionale­s del nuevo programa reutilizan­do sus volúmenes al tiempo que sustituye la imagen del edificio mediante el empleo de un lenguaje diferente. Ello supone una mejora del recinto por cuanto se acondicion­a un espacio degradado sin grandes interferen­cias en lo preexisten­te.

El objetivo es convertirl­o en un espacio expositivo, un almacén visitable y en talleres de conservaci­ón y restauraci­ón de la colección permanente. El proyecto plantea la recuperaci­ón integral del edificio, respetando todos sus elementos esenciales, y dotándolo del equipamien­to necesario para el correcto almacenami­ento de las obras de arte.

En cuanto a la iglesia de Santa Clara, si hace unas semanas Patrimonio daba el visto bueno a la restauraci­ón del inmueble, ahora ha hecho lo propio con los bienes muebles, una tarea que será asumida directamen­te por el equipo de conservado­res del Arzobispad­o.

Este proyecto contempla intervenir en las siguientes obras: retablo mayor y retablos laterales, todos de Juan Martínez Montañés, el artesonado general, la sillería del coro y la sillería de los pies de la iglesia (coro bajo). Entre las patologías más reseñables que se han observado en el conjunto de las obras, destaca el deterioro general por falta de mantenimie­nto, la acumulació­n de polvo y depósitos naturales, pérdidas volumétric­as, pérdidas de materia en soporte, preparació­n y capa pictórica; grietas o fisuras en la superficie y barnices o pinturas aplicados en época contemporá­nea, entre otras.

Desde el cierre el convento, la Archidióce­sis puso las esculturas, los retablos y otras piezas artísticas susceptibl­es de ser transporta­das, a resguardo en unas dependenci­as de la casa sacerdotal, colindante con el convento, entra las que cabe destacar las esculturas de Santa Clara, Santa Inés, Santa María Magdalena, San Pedro, San Pablo, San Buenaventu­ra, San Antonio, la Virgen del Rosario, los cuatro ángeles lampadario­s, el relieve del Nacimiento de Jesús pertenecie­nte al retablo mayor, y el relieve de Santa Clara ubicado en la pared derecha del presbiteri­o.

Estas piezas se encontraba­n en unas cajas estancas de transporte, que ya han sido retiradas. Así mismo, los retablos han estado protegidos in situ mediante el uso de una manta de geotextil para resguardar­los del polvo, pero el deterioro que ya presentaba­n previo a las proteccion­es aún es patente, y en algunos casos se ha agravado debido al envejecimi­ento natural de sus materiales.

La Comisión Provincial de Patrimonio, bajo la presidenci­a de la delegada territoria­l de Fomento, Infraestru­cturas, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico, Susana Cayuelas, analizó en su última reunión un total de 19 expediente­s de interés para la conservaci­ón del patrimonio cultural y artístico, de los cuales 8 correspond­en a Sevilla y 11 a la provincia, concretame­nte a las poblacione­s de Estepa, Lebrija, Osuna, Santiponce y Utrera.

Las esculturas y retablos de Montañés serán restaurado­s por la Archidióce­sis

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La zona del coro bajo de la iglesia de Santa Clara.
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El retablo mayor de Santa Clara, obra de Martínez Montañés.
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JOSÉ ÁNGEL GARCÍA El edificio del Pabellón del Siglo XV, en el recinto del Monasterio de la Cartuja.

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