Controlar la psoriasis en verano
● Hoy en día es posible mantener la enfermedad y sus manifestaciones bajo control con un correcto tratamiento y seguimiento por parte del especialista
Ya está aquí el verano, y tras largas semanas de confinamiento por fin nos encontramos en la recta final de la desescalada que viene acompañada de un creciente aumento de la presencia de gente en las calles y de la realización de actividades al aire libre. Las altas temperaturas exigen hacerlo con el mayor confort posible y utilizar prendas que, a menudo, dejan al descubierto gran parte de nuestra piel. Una idea que puede resultar incómoda para más de un millón de personas que padecen psoriasis en España.
Afortunadamente, hoy en día es posible mantener la enfermedad y sus manifestaciones bajo control con un correcto tratamiento y seguimiento por parte del especialista. Además, durante el periodo estival, una gran parte de los pacientes con psoriasis percibe una mejoría en sus lesiones, relacionada, en parte, con factores propios de la estación, como la exposición al sol y al agua del mar. Sin embargo, los expertos recomiendan tomar precauciones para poder obtener un beneficio real de estas circunstancias. En verano, ir a la playa a tomar el sol o disfrutar del agua del mar puede generar grandes beneficios para la piel. El sol es muy beneficioso para la piel con psoriasis. Eso sí, siempre hay que tomarlo con moderación, evitando las horas de mayor insolación y utilizando cremas de protección solar.
Es importante cuidar la piel después de exponerla al sol: después de tomar el sol con precaución, no olvides ducharte e hidratar bien tu piel. El agua del mar es un gran aliado frente a la psoriasis en verano. Bañarse en agua salada es perfecto para la piel ya que ayuda a disminuir la inflamación, a cicatrizar las heridas y además calma el picor. Asimismo, es importante mantener el seguimiento médico durante todo el año. Si bien la crisis sanitaria ha limitado las consultas presenciales, es recomendable contactar con el especialista y retomar las visitas cuando sea posible. La psoriasis es una enfermedad crónica del sistema inmune no contagiosa que se manifiesta en forma de picor, dolor, engrosamiento de las capas de la piel, enrojecimiento, escamas, sensación de ardor, irritación cutánea o rigidez en las articulaciones, aunque es posible controlar estos síntomas.
Cabe destacar que esta patología no solo afecta a nivel inmunológico, sino que también afecta a nivel emocional y psicológico. Se pueden seguir determinadas pautas para reducir los efectos de la psoriasis y mejorar la calidad de vida, como hacer deporte, controlar el estrés, cuidar bien la piel o mantener una actitud positiva, pero sobre todo es muy importante llevar un buen seguimiento.
La revolución digital y sus múltiples opciones han impactado de forma disruptiva en el ámbito de la salud, propiciando el nacimiento de la conocida como e-Salud, en la que tanto el paciente como el profesional sanitario adquieren una nueva dimensión. Estas herramientas han desempeñado un papel protagonista durante la pandemia, proporcionando una alternativa segura para mantener el cuidado de la salud desde casa.
Con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes con psoriasis y ayudarles a permanecer informados y desempeñar un
La aplicación ‘MiPsoriasis’ permite monitorizar la afección y el tratamiento
papel activo en el control de la enfermedad, Acción Psoriasis y Novartis se han apoyado en las nuevas tecnologías para desarrollar herramientas digitales, como MiPsoriasis, que permiten a los usuarios monitorizar la afección, permanecer en contacto con el dermatólogo y llevar al día la medicación. A menudo se piensa que la psoriasis sólo afecta a la piel, a pesar de que el dolor en las articulaciones podría ser una señal de que se ha desarrollado artritis psoriásica2 forma común de artritis inflamatoria que acompaña a la psoriasis entre 20-30% de los casos3. Además del dolor articular, existen otros síntomas menos conocidos que el paciente no siempre asocia a esta patología.