Viñales manda a la espera del campeón
● Marc Márquez no rodó en los libres, dominados por las Yamaha, con Rossi a rebufo y Quartararo probando
Cuando no está el gato, los ratones se divierten. A la espera de Marc Márquez, que se probará en los entrenamientos clasificatorios de hoy y siguió los ensayos de ayer desde el box del Honda Repsol, el protagonismo en los libres de MotoGP del Gran Premio de Andalucía fue para Yamaha, con Maverick Viñales como el mejor del día por su tiempo de por la mañana, con Valentino Rossi a rebufo. Y, como la semana anterior, la FP1 fue la referencia: los 12 pilotos más rápidos de la tabla combinada de tiempos lograron sus cronos en la sesión matinal, mientras que por la tarde sólo mejoraron Johann Zarco (Ducati) y los tocados Cal Crutchlow (Honda) y Álex Rins (Suzuki).
Sin el campeón del mundo, referencia de la categoría, y con Fabio Quartararo (Yamaha), líder del Mundial, dedicado a buscar ritmo de carrera, hubo tiempo para el protagonismo de otros: Rossi fue segundo y Nakagami sorprendió con el mejor crono de por la tarde, porque nadie esperaba que sin Márquez y con Crutchlow bajo mínimos una Honda rondase por los mejores tiempos del día.
Yamaha y KTM se repartieron el Top 6 en el FP1, con el asfalto a 27 grados: Maverick Viñales marcó el mejor tiempo (1.37,063) en su último giro, con el tiempo cumplido, tras montar neumáticos nuevos (duro delante y blando detrás), lo mismo que había hecho su compañero de equipo, un redivivo Rossi (blandos ambos) pocas vueltas antes. Parece que Yamaha ha dado con la tecla de la M1 que pedían tanto el español como el italiano. Massimo Meregalli, director deportivo del Monster Energy Yamaha MotoGP, reconocía que Viñales abrió tres motores en el pasado Gran Premio de España y que se enviaron motores a Japón para que la fábrica los analizase. Ahora está por ver si el buen rendimiento en los ensayos se mantiene en carrera.
Y tras las M1 oficiales se colocó Brad Binder con la KTM, lo que no es una sorpresa, ya que el ritmo del sudafricano el pasado domingo era similar a los de la cabeza, aunque rodando en solitario tras salirse en la quinta vuelta. En Jerez se encuentra como pez en el agua, sobre todo después de su inolvidable remontada en Moto3 en 2016, cuando ganó saliendo último. Ojo con el oficial de la marca austriaca, que tiene ganas de montar el taco.
Cerró el Top 5 su compañero de equipo, Pol Espargaró, que lideró buena parte de la sesión, pero acabó tras la Yamaha satélite de Franco Morbidelli. La primera Ducati fue la de Jack Miller, pordelante esta vez de la de Aleix Espargaró, que colocó a la Aprilia en el Top 10.
Quartararo se tomó la sesión con calma, buscando ritmo de carrera y tanto Crutchlow como Rins acusaron sus precarias condiciones físicas, cerrando la tabla de tiempos de la mañana. Por la tarde, en la segunda sesión (a la hora de la carrera del domingo y con el asfalto a 53 grados) y con la mayoría montando neumático duro delante y blando atrás, Quartararo, se colocó en cabeza rodando con regularidad en 1.38 arrebatando el mejor crono a Zarco, que tras lograrlo se fue al suelo. Igual le pasó a Pol Espargaró, que tras batir el tiempo del líder del Mundial cayó en la gravilla de la curva Michelin tras encontrarse a Zarco trazando por fuera.
Espargaró resistió el ataque de las Yamaha primero y de las Ducati después, hasta que en el último minuto Zarco se colocó en cabeza antes de que Nakagami fuese el único en bajar de 1.38 en dos vueltas consecutivas, colocando a la Honda en lo alto de la tabla de tiempos, aunque lejos del logrado por Viñales por la mañana. El japonés no mejoró su registro de la FP1, con lo que acabó la jornada octavo en la tabla combinada de tiempos, pero se estrenó como dominador de una tanda.
Márquez se pasó casi todo el tiempo en la clínica del circuito con su rehabilitación