España quiere recuperar hoy la senda del gol en un amistoso en Holanda
● La selección juega un amistoso ante Holanda con la idea de recuperar las sensaciones ofensivas ● Los dos equipos llegan con importantes ausencias
La selección española encara la visita a Países Bajos en un amistoso previo a los partidos decisivos de la Liga de Naciones con el objetivo de recuperar el gol perdido, tras marcar sólo uno en sus tres últimos partidos, lo que invita a probar a Luis Enrique con variantes y el regreso de Morata.
A días de jugarse el pase a la fase final de la Liga de Naciones con un duelo clave ante Alemania, España rinde visita a Holanda en busca de buenas sensaciones. La derrota, un año y once meses después, frente a Ucrania dejó un sabor amargo en el último compromiso que desea quitarse de encima Luis Enrique.
España se presenta en Amsterdam sin el jugador que asume el liderazgo del juego, Thiago, su nueva estrella, Ansu Fati, los dos laterales derechos habituales, Jesús Navas y Dani Carvajal, y el delantero que más continuidad tiene con Luis Enrique, Rodrigo Moreno. Las lesiones y el coronavirus pasan factura en tiempos de pandemia que invitan a las probaturas.
Como los amistosos, banco de pruebas, para que se pueda estrenar Marcos Llorente, que se ganó a pulso con grandes actuaciones en el Atlético de Madrid la llamada de la selección, o el regreso de Íñigo Martínez en el centro de la defensa, Koke en el centro del campo, Marco Asensio en la mediapunta y Morata como delantero centro. Se presenta Bellerín como nueva alternativa en el carril derecho. Todos aspiran a minutos y a cambiar la cara de España.
La que trabaja Luis Enrique tiene una nueva identidad con un extremo puro como Adama Traoré. Seguirá encajándola en su sistema en busca del rematador que saque provecho a todo lo que genera. El empate sin goles ante Portugal en el último amistoso fue seguido de un tanto para derrotar a Suiza por la mínima en el Alfredo di Stéfano y la caída inesperada en Kiev frente a Ucrania. Un solo tanto a favor en 270 minutos.
La selección de Países Bajos llega al amistoso con la necesidad de mejorar una imagen deteriorada tras la marcha de Ronald Koeman, pues en los últimos cuatro partidos ha cosechado dos empates, dos derrotas y metido un solo gol. El seleccionador Frank de Boer ya ha dicho que su prioridad es conseguir buenos resultados en los duelos de Liga de Naciones, el 15 de noviembre contra Bosnia Herzegovina y tres días después ante Polonia. Los neerlandeses son terceros de su grupo y tienen a Italia y Polonia a uno y dos puntos, respectivamente.
Para el amistoso contra España, el técnico tiene pensado dar descanso a sus piezas más importantes y poner “a muchachos que se han visto poco en la selección”, avisó. Tres de esos jóvenes que podrían salir este miércoles en el once inicial provienen del AZ Alkmaar: el atacante Calvin Stengs, de 21 años, el lateral izquierdo Owen Wijndal, de 20, y Teun Koopmeiners.
Luis Enrique
Seleccionador de España
En el ataque, De Boer suele alinear a Memphis Depay y al sevillista Luuk de Jong. El bajo perfil que tendrá la alineación neerlandesa contra España da opciones al joven delantero del PSV Eindhoven Donyell Malen o incluso al veterano Ryan Babel. Está por ver el esquema. Koeman jugaba habitualmente con un 4-2-3-1, pero su sucesor ha pasado de repetir ese dibujo a probar alternativas como el 4-33 y el 5-3-2.
En el capítulo de bajas, De Boer no podrá contar con los centrales Van Dijk y De Ligt, dos piezas básicas. Si se le da descanso al jugador del Inter De Vrij, Veltman o Daley Blind podrían salir en el once inicial. Los porteros Cillessen y Bijlow están lesionados y es probable que Tim Krul sea reservado para las citas oficiales.
Se han caído cuatro jugadores de la convocatoria. Junto a los porteros, el centrocampista ofensivo Ihattaren, por enfermedad, y Bergwijn, que fue mandado de vuelta a Inglaterra el lunes.
El amistoso se jugará a puerta cerrada, una medida tomada por el Gobierno para frenar los contagios de coronavirus. Durante el calentamiento, los jugadores holandeses llevarán una camiseta con las palabras “One Love”, el eslogan de una campaña contra el racismo.
Lo normal de los jugadores es que vayan hacia atrás, con Marcos Llorente es al revés”