La cripta del Patio de Banderas
Veinte siglos bajo tierra. Desde el 1974, cuando fueron encontrados los restos arqueológicos, las excavaciones se han sucedido en el Patio de Banderas. El objetivo, que no acaba de concretarse, es abrir este nuevo espacio a las visitas que se realizan al Real Alcázar. Las investigaciones, comandadas por el arqueólogo Miguel Ángel Tabales, y la adecuación del espacio concluyeron siendo Jacinto Pérez Elliot director del conjunto palaciego. Posteriormente, se han acometido tareas para dotar a la cripta de medidas de seguridad y para garantizar la accesibilidad. Fruto de estas actuaciones se han realizado visitas para grupos y para investigadores. El Ayuntamiento continúa actualmente trabajando para que este tesoro oculto se pueda conocer con regularidad. Para ello, encargó un estudio de viabilidad cuyo análisis se basa en el proyecto básico para la construcción de la cripta, redacto por el arquitecto Francisco Reina en el año 2012; y la memoria de investigación de las excavaciones arqueológicas 2012-2014, dirigido por Tabales. Este documento fija en unos 3,7 millones de euros la inversión necesaria para abrir la cripta y prevé un aforo máximo diario de 1.360 personas, visitas de entre 20 y 30 minutos, un precio de 3 euros y dos posibles escenarios de gestión: el directo, por parte del Patronato del Real Alcázar, o mediante la concesión a un tercero.