Aval para actuar en la Torre Mocha
entorno del arroyo Guadairilla, junto al Cordel de Mairena, y de los que fue alertado por el grupo Alwadi-ira, integrado en Ecologistas en Acción. Podría tratarse de algún tipo de estructura hi
La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico se pronunció ayer a favor del proyecto de actividad arqueológica preventiva en el sector de la Torre Mocha del Castillo, necesario antes de acometer actuaciones de emergencia. Según la Junta, el proyecto reúne condicionantes como la necesidad de conocer arqueológicamente el ámbito objeto de rehabilitación y puesta en valor dentro de los planteamientos del plan Almena II y el interés científico para aplicar una metodología arqueológica a un espacio
dráulica o puente para cruzar el cercano cauce, según las primeras interpretaciones.
Según Alwdi-ira, los restos han aparecido a unos 500 metros de la vía pecuaria. En el escrito en el que lo notifican al Ayuntamiento, precisan que es una estructura compuesta de sillares de piedra caliza alberiza, con unas dimensiones aproximadas de 110x40 que conjuga un importante valor monumental edificatorio con la presencia de contextos arqueológicos inéditos. Así, antes de futuras actuaciones de conservación y rehabilitación para un posible uso, se debe “valorar el conocimiento arqueológico como punto de partida”. La intervención incluye análisis paramental integral de las estructuras emergentes, análisis patológico, revisión de intervenciones precedentes, el planteamiento de las unidades de excavación estratigráfica y el estudio del espacio interior.
centímetros, formando dos filas paralelas, con relleno interior, que pudieran pertenecer a un puente que vadease el arroyo en ese punto. El hallazgo no ha podido ser datado, aunque Alwadiira asegura que se han encontrado restos cerámicos de época romana cerca.
Tras la comprobación in situ, el Ayuntamiento ha iniciado el protocolo que marca la ley para la protección, valoración y conservación. La Delegación Territorial de Cultura ya dispone de un informe técnico, en el que se certifican “restos de valor arqueológico”, los datos de su localización y posible interpretación preliminar.
La delegación municipal de Patrimonio que dirige María de los Ángeles Ballesteros apunta que se trata de una estructura realizada en piedra calcarenita, muy arrasada superficialmente. Puede tratarse tanto de una “estructura hidráulica, como de algún tipo de elemento usado para facilitar el cruce del arroyo cercano”.
El Consistorio ha dado traslado al departamento de Urbanismo para dar de alta estos restos en el inventario municipal. El protocolo también fija que se informe a los propietarios del suelo para su conocimiento y para instarle a su protección. Alwadiira recuerda que dicho yacimiento no se encuentra catalogado en el PGOU, por lo que considera necesario su estudio y protección con su inclusión.