El Athletic, con más fatiga mental que real
Ha jugado ocho partidos menos que el Sevilla, aunque arrastra los dos palos en las finales de Copa
Los meses de marzo y abril han dejado algo tocado al Athletic Club de Bilbao, que sólo ha logrado dos victorias en este periodo, aunque una de ellas fue de peso y benefició de alguna manera al Sevilla, al producirse sobre el Atlético de Madrid (2-1). A principios de cada mes tuvo la oportunidad de ganar la Copa del Rey, pero primero cayó ante la Real Sociedad y luego frente al Barcelona. El resultado es que el equipo de Marcelino llega al final de la temporada ya con la lengua medio fuera, pero más por un estado anímico tocado, tras los dos varapalos seguidos, que por una fatiga física real: ha jugado ocho partidos menos que el Sevilla.
La irrupción de Marcelino en el banquillo de San Mamés, con cierta sorpresa porque no se esperaba en Bilbao la destitución de Gaizka Garitano, tuvo un efecto casi inmediato con las victorias en la Supercopa de Europa: primero sobre el Real Madrid, en La Rosaleda (21), y luego sobre el Barcelona, en su primera visita a Sevilla, en el Estadio de la Cartuja (2-3). Pero luego el ex técnico asturiano, dándole algo de más verticalidad al Athletic, no fue capaz de encontrar el camino de la regularidad.
Lo cierto es que llega al tramo final con poco que decir y una sensación de decepción. “No está siendo una temporada del todo mala, con el tiempo se le dará importancia al haber ganado una Supercopa”, tuvo que defender Williams. “No estamos teniendo regularidad en Liga, pero a los rivales les cuesta ganarnos”, añadió. Y esto es cierto, pero no lo es menos que el Sevilla llega más fresco pese a haber jugado ya 50 partidos, frente a los 42 del Athletic. La cabeza manda. Y el Athletic, además, jugó el miércoles el aplazado con el Valladolid... y empató.