Normalidad y escasa incidencia en la primera jornada de paro de camiones
● Los principales centros logísticos de España trabajan sin problemas y bajo supervisión policial
La primera jornada del paro indefinido convocado desde ayer por los transportistas agrupados en la Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte ha transcurrido con normalidad y escasa incidencia, al contrario de lo que ocurrió con la protesta que protagonizó el pasado mes de marzo la misma organización.
Pese al poco seguimiento, el presidente de la Plataforma, Manuel Hernández, se mostró “satisfecho” con el desarrollo de la primera jornada de paro, que arrancó en Madrid con una manifestación desde Atocha hasta el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
La concentración congregó a cerca de 1.500 transportistas, según los cálculos policiales, y a decenas de miles, de acuerdo con los cifras aportadas por los convocantes, que se han reunido a última hora de la tarde en el estadio Civitas Metropolitano.
Tras no ser recibidos por ningún representante del ministerio, Hernández advirtió de unas “navidades muy oscuras” si no se buscan soluciones para que se garantice el cumplimiento de la ley, aprobada hace unos meses, que prohíbe que los transportistas trabajen por debajo de costes.
Sin embargo, explicó que no es intención de su colectivo que la protesta se prolongue tanto como la del pasado marzo, que duró 20 días y puso contra las cuerdas a la cadena de distribución logística española, a la vez que asegura que la protesta no busca “hacer daño” a ningún sector, a las puertas del periodo de ventas más intenso del año, incluidos el Black Friday.
Por su parte, la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, calificó de “mínima” la incidencia de la protesta, con un total de 14 incidencias registradas a primera hora de la mañana que no han evitado que l a j ornada haya transcurrido con absoluta normalidad.
Sánchez agradeció a todos los transportistas que decidieron no secundar el paro convocado por la Plataforma, y volvió a recordar que este “carece de justificación”, ya que no contribuye a solucionar los problemas del sector y “puede dañar los intereses de otros sectores económicos y al conjunto de la sociedad”.
En este sentido, reiteró su respeto “total y absoluto” al derecho a la manifestación, aunque ha vuelto a insistir en que la Administración ya ha dado “respuesta y satisfacción a numerosas reivindicaciones históricas de los transportistas”.
SIN INCIDENTES RELEVANTES
Los 50.000 efectivos que, según Sánchez, desplegó el Gobierno para garantizar el transporte de mercancías por carretera permitieron que no se hayan producido apenas incidencias.
Los principales problemas, según destacaron desde el Ministerio del Interior, tuvieron lugar en la localidad de El Provencio (Cuenca), donde se produjeron pinchazos en las ruedas de tres semirremolques de empresa, en tanto que las fuerzas de seguridad identificaron algunos piquetes en Salas (Asturias) y Oviedo.
En la mayoría de las comunidades autónomas no se registró ningún tipo de incidentes, aunque en algunas regiones como Galicia, concretamente en la provincia de Lugo, los transportistas reconocieron que el tráfico de camiones ha sido algo menor de lo habitual.
El único punto negro de la jornada fue la quema de camiones en Villaescusa (Cantabria), un acto que la Guardia Civil investiga si guarda algún tipo de relación con el paro.
En la misma línea, los principales centros logísticos, de distribución y vías de comunicación no se vieron afectados por el paro, registrando los movimientos habituales para un lunes.
La ministra de transporte insistió en que esta huelga “carece de justificación”
El centro de distribución alimentaria más importante del país, Mercamadrid, funcionó con “absoluta normalidad”, cuando en el paro de marzo vio reducida su actividad considerablemente –hasta un 50 % de sus productos algunos días–.
Las principales patronales del sector volvieron a mostrar su rechazo a un paro que no cuenta con el apoyo de ninguna asociación de las que sumaron a su anterior convocatoria, como fue el caso de Fenadismer, Fetransa o Feintra.
Así, la Confederación Española del Transporte de Mercancías (CETM) informó de “absoluta normalidad” en el desarrollo de la jornada y volvió a criticar el “sinsentido” de la convocatoria, tras las mejoras acordadas hace meses con el Gobierno que “mejoran absolutamente” las condiciones de los trabajadores.
Por su parte, la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (Astic), que también rechaza el paro, explicó que los principales puertos del país operan con normalidad y no se ha registrado la presencia de piquetes.