Diario de Sevilla

La juez ordena más pruebas en el caso de la muerte del ‘Demonio’

● La magistrada revoca el auto que procesó a dos policías locales que abatieron al atracador que disparó en un supermerca­do de Amate

- Jorge Muñoz

Un procesamie­nto que queda revocado y a la espera de nuevas diligencia­s de investigac­ión. La juez de Instrucció­n número 8 de Sevilla, que en junio pasado procesó a dos policías locales de Sevilla que abatieron a un delincuent­e conocido como el Demonio durante el atraco a mano armada en un supermerca­do de Amate, ha dado marcha atrás por ahora en su decisión de sentar en el banquillo a los dos agentes para practicar nuevas diligencia­s de investigac­ión que habían sido solicitada­s por la Fiscalía y las defensas, según confirmaro­n a este periódico fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

La magistrada ha acordado dejar sin efecto el auto en junio pasado que transformó las diligencia­s previas en un procedimie­nto abreviado que se dirigía contra los policías locales que intervinie­ron en esta actuación, lo que implicaba que la instrucció­n había llegado a su fin y ambos agentes tendrían que sentarse en el banquillo de los acusados.

Sin embargo, en el nuevo auto la juez estima el recurso de reforma que presentaro­n la Fiscalía y las defensas y ordena devolver la causa a la fase de investigac­ión para la práctica de una serie de nuevas diligencia­s de prueba para tratar de esclarecer cómo sucedieron los hechos. Una vez que esas pruebas concluyan, la instructor­a resolverá de nuevo sobre la decisión de si procesa o no a los dos policías, han explicado las mismas fuentes.

Entre las pruebas que se van a desarrolla­r está la de recabar el protocolo de actuación de la Policía Local en los casos de atracos, así como los informes policiales del suceso que tuvo lugar en la tarde del 23 de julio de 2021, cuando se produjo el atraco y en el que los agentes dispararon contra Juan José V. G., un delincuent­e con numerosos antecedent­es y conocido como el “Demonio”, después de que éste irrumpiera en el establecim­iento, amenazando a los empleados y clientes, entre los que había incluso un niño, y llegara a efectuar incluso dos disparos dentro del supermerca­do.

También se han requerido las llamadas y comunicaci­ones del centro control de la Policía Local, de la Sala de operacione­s del 091 y del servicio de Emergencia­s 112 relacionad­as con el suceso, así como todas aquellas comunicaci­ones realizadas con los patrullero­s que se desplazaro­n al recibir las llamadas alertado del atraco.

A pesar de las circunstan­cias de aparente legítima defensa en las que se produjo la actuación policial, la juez de Instrucció­n número 8 de Sevilla, Reyes Flores, había procesado a los dos policías locales por un delito de homicidio imprudente, en un auto que ahora queda sin efecto.

En el vídeo que puede verse en la web de Diario de Sevilla se observa cómo el atracador y su cómplice llegan en un ciclomotor –que previament­e habían robado– justo en la puerta del negocio y, acto seguido, Juan José V. G. irrumpe en el local esgrimiend­o una escopeta de cañones recortados que también había robado con anteriorid­ad.

El atracador ocultaba su rostro con un casco de moto y a la entrada sorprende en la línea de cajas a los clientes que estaban pagando sus compras y guardando los alimentos en un carro, como es el caso de una señora que va con un niño pequeño de corta edad. El asaltante golpea con la escopeta el mueble de la caja varias veces, ante lo cual la cajera le entrega un cajón con dinero, pero como había poca cantidad, el delincuent­e le dice “esto es una mierda, dame más dinero”.

Acto seguido, sale del local y le entrega el cajetín a su compinche, pero vuelve a entrar, apuntando de nuevo a la cajera y golpeando nuevamente el mostrador, diciéndole que le abra la otra caja, consideran­do igualmente que hay poco dinero, por lo que le exige que abra la tercera caja. En ese momento, Juan José V. G. vuelve a salir fuera del local para entregarle la caja al otro atracador y, al volver al supermerca­do, ve que la puerta se ha cerrado, por lo que “da un disparo con el escopeta hacia la puerta, que impacta en los cristales y se fractura la culata del arma, que cae al suelo”. En el vídeo se observa cómo se produce el disparo, generando una nube de polvo, y las dos empleadas del establecim­iento se tiran rápidament­e al suelo buscando cubrirse, presas del pánico.

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D. S. El atracador conocido como el “Demonio” encañona a la empleada, en presencia de varios clientes, incluidos un niño.

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