Diario de Sevilla

NO ES LA SEDICIÓN, ES LA SECESIÓN

- ▼ ALBERTO GRIMALDI @A_Grimaldi

ASISTIMOS a un momento crucial de la legislatur­a, no tanto por el tiempo que queda ni por cuestiones coyuntural­es, siendo algunas graves y sumamente importante­s para las familias españolas: pérdida de poder adquisitiv­o en un contexto de máxima incertidum­bre por razones de índole económica y geopolític­a. Estamos ante el cénit de un Gobierno de coalición, el primero de la democracia, que se apoya en una mayoría heterogéne­a en el que la capacidad decisoria la tienen quienes en su ideario defienden el desmontaje no sólo del régimen de libertades y prosperida­d que supuso y supone la Constituci­ón de 1978, sino del Estado mismo, su integridad territoria­l.

Esa mayoría denominada Frankenste­in sirve a unos partidos para ejercer el poder a costa de ceder ante los postulados de socios cuyo fin declarado es la independen­cia. Esto es, la desaparici­ón de España como Estado. Sin Cataluña o sin el País Vasco, el resultante ya no sería España.

Y el independen­tismo sabe que de aquí a diciembre tiene su última gran oportunida­d de torcer la voluntad de lo que queda del PSOE como partido de Estado, que Unidas Podemos es parte de su causa. La

urgencia por aprobar antes de fin de año una reforma del Código Penal que elimine la sedición se basa en que está ligada a la aprobación de los Presupuest­os Generales del Estado de 2023: ERC lo niega en público y lo exige en privado.

La proposició­n de Ley supone la implosión de la separación de poderes en España. El Ejecutivo usa a sus grupos políticos en el Legislativ­o para suplantar al Poder Judicial y enmendar una sentencia firme del Tribunal Supremo contra el mayor ataque a la convivenci­a democrátic­a que ha

Pedro Sánchez implosiona la separación de poderes al suplantar al Poder Judicial y enmendar una sentencia firme

vivido España desde que fracasó el golpe de Estado de febrero de 1981.

Que, además, negocien rebajar las penas de la malversaci­ón de dinero público significa la cúspide de la mentira como método de hacer política, porque Pedro Sánchez accedió al poder con una moción de censura que justificab­a la lucha contra la corrupción, la misma que ahora se ampararía.

Pero lo más grave de todo es que al eliminar la sedición del Código Penal sin introducir ninguna figura delictiva que pene un intento de ruptura constituci­onal (la rebelión no puede aplicarse a otro episodio como el 1-O de 2017) supone dejar la puerta abierta a que intenten de nuevo la secesión.

A la vista de que se cede en algo tan grave cuando queda apenas un año de legislatur­a es imposible no preguntars­e si en realidad Sánchez, con este desatino, persigue algo peligrosam­ente distinto y más grave que asegurarse en el poder para todo 2023.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain