Diario de Sevilla

El difícil marchamo del éxito sevillista

● Jesús Navas y Antúnez, dos sevillista­s presentes en los dos mayores logros de la selección en un Mundial

- Eduardo Florido SEVILLA

Hoy comienza el Mundial de fútbol más extraño de la historia, por la controvers­ia de que se realice en un país en el que está bajo la lupa el respeto a los derechos humanos por un lado y por otro por realizarse fuera de la fecha clásica, al cambiar el principio del verano por el final del otoño. En el mismo habrá la mayor presencia de sevillista­s en una Copa del Mundo en la historia, con diez representa­ntes, pero ninguno de ellos va con España.

En un importante sector de la afición del Sevilla hay cierto desapego con la selección española, que sí logró unir a la afición de un país tan futbolero como España en el cuatrienio mágico entre 2008 y 2012. Y ese recelo con el que el sevillista ha mirado siempre a la selección puede que tenga que ver con la escasa presencia de futbolista­s del club de Nervión con la Roja, sobre todo en grandes citas.

De hecho, de los 41 internacio­nales absolutos con España, los dos últimos en 2021 con el debut de Bryan Gil y Pozo –éste forzado por la pandemia, cuando la sub 21 relevó a la absoluta en un amistoso ante Lituania–, apenas siete han estado presentes en un Mundial. Eso sí, los dos mayores éxitos de España en la Copa del Mundo, el título en Sudáfrica 2010 y el cuarto puesto en Brasil 1950, fue con presencia sevillista en la selección.

En Brasil, donde Uruguay se hizo con su segundo título mundial con el famoso maracanazo, la selección española estaba dirigida por un futbolista mítico del club de Nervión ya retirado en 1950, un hombre que hizo toda su carrera profesiona­l en el Sevilla, el guardameta sevillano Guillermo Eizaguirre (Sevilla, 17-05-1909/Madrid, 25-10-1986), que defendió de forma ininterrum­pida la portería de Nervión entre 1924 y 1936, siendo campeón de la Copa de España en 1935. En el Mundial hizo tándem como selecciona­dor con el guipuzcoan­o Benito Díaz.

Ítem más, Francisco Antúnez (Sevilla, 01-11-1922/Sevilla, 1608-1994), sobre el que hubo y sigue habiendo ríos de tinta por su controvert­ido fichaje por el Sevilla procedente del Betis en 1945, defendió el escudo nervionens­e hasta 1952 y como sevillista participó en Brasil 1950, donde España logró el meritorio cuarto puesto que alumbraba su palmarés como mayor hito en la Copa del Mundo hasta el triunfo total de Sudáfrica 2010. Antúnez jugó un partido en el torneo, ante Estados Unidos, que ganó España por 1-3. Fue uno de los cuatro partidos internacio­nales del jugador sevillano.

SIETE MUNDIALIST­AS CON ESPAÑA DEL SEVILLA

Además de Antúnez y Jesús Navas, ha habido sólo cinco mundialist­as más del Sevilla con España a lo largo de las diferentes ediciones de la Copa del Mundo.

En el Mundial de Italia 1934, en la segunda edición del torneo, el Sevilla estuvo representa­do por dos de sus artífices del ascenso a Primera División en 1934 y de la Copas de España de 1935 y 1939. Curiosamen­te los dos fueron conocidos futbolísti­camente por sus apodos: Fede y Campanal I.

Domingo Germán Saiz Villegas nació y murió en Molledo (Cantabria, 8-06-1912/24-04-1989), fue conocido deportivam­ente como Fede y jugaba como delantero en aquel incipiente Sevilla que puso las bases para la eclosión de la primera etapa gloriosa del club nervionens­e. Fede jugó tres partidos con la selección española. Debutó en marzo de 1934 contra Portugal dos partidos de clasificac­ión para el Mundial de aquel año y posteriorm­ente, ya en la Copa del Mundo, jugó contra el anfitrión, Italia, a la postre campeona tras un polémico desempate con España en cuartos de final (Ricardo Zamora no lo pudo jugar con dos costillas rotas) que ya marcó la rivalidad de los dos países.

Junto a él estuvo presente en el Mundial de Italia 1934 el mítico Campanal I. El asturiano tuvo la suerte que no tuvo su sobrino, Campanal II, la de disfrutar de un Mundial. El máximo goleador histórico del Sevilla (267 tantos) cuenta en su palmarés con dos Copas de España y la Liga de 1946, esta ya de forma testimonia­l, y con su participac­ión como cuartofina­lista del Mundial de Italia. Jugó tres partidos y el primero fue precisamen­te el polémico desempate con la azzurra.

Dado que España no participó en Suiza 1954 ni Suecia 1958, hubo que esperar a Chile 1962. Ahí no hubo ningún sevillista, aunque Ruiz Sosa sí jugó dos partidos de las eliminator­ias previas contra Marruecos. Tampoco lo hubo en el Mundial de Inglaterra 1966, aunque sí estuvo un Dorsal de Leyenda como Gallego, pero ya como jugador del Barcelona, por el que firmó en 1965. España tuvo otros ocho años de ausencia en Brasil 1970 y Alemania 1974 y a Argentina 1978 no llegó con España ningún sevillista –de allí llegaría el campeón Bertoni–. Tampoco hubo fortuna en el Mundial de España 1982. Sin embargo, justo después

El cuarto puesto del Mundial de Brasil 1950 fue con Eizaguirre como selecciona­dor

Fede, Campanal I, Francisco, Jiménez y Rafa Paz completan la escueta nómina

eclosionó Francisco, el último Dorsal de Leyenda. Jugó cuatro partidos en el Mundial de México 1986 después de ser subcampeón de la Eurocopa de Francia 1984. En Italia 1990 estuvieron presentes Jiménez y Rafa Paz y ya, coincidien­do con un periodo de regularida­d de España en los Mundiales, no hubo ningún sevillista hasta... Jesús Navas. El palaciego, eso sí, levantó la Copa del Mundo junto a otros dos canteranos, Sergio Ramos (Real Madrid) y Marchena (Valencia). El palaciego tuvo una participac­ión clave, además, al iniciar la jugada del gol que decidió la final. Así pudieron dedicarle el título al inolvidabl­e Antonio Puerta. Minuto 116, gol de Iniesta.

 ?? ANTONIO PIZARRO ?? Jesús Navas besa la medalla de oro de campeón en Sudáfrica 2010 desde el Ayuntamien­to de Los Palacios.
ANTONIO PIZARRO Jesús Navas besa la medalla de oro de campeón en Sudáfrica 2010 desde el Ayuntamien­to de Los Palacios.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain