Obiang busca la reelección en una cita con denuncias de la oposición
Las elecciones presidenciales de Guinea Ecuatorial, en las que Teodoro Obiang busca un sexto mandato de siete años, se desarrollaron ayer marcadas por las denuncias de irregularidades que hicieron sus dos rivales de la oposición.
El pequeño país centroafricano, de cerca de 1,5 millones de habitantes, celebró unos comicios presidenciales que estaban previstos en 2023, pero que se adelantaron para ahorrar costes y hacerlos coincidir con las elecciones legislativas y municipales. Unos 420.000 votantes estaban llamados a las urnas en 1.486 mesas de votación.
Los colegios abrieron “sin ningún incidente”, informaron fuentes cercanas al gubernamental Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE). El país sólo ha conocido dos presidentes desde su independencia de España en 1968: Obiang, de 80 años y gran favorito en los comicios; y su tío Francisco Ma
Guinea sólo conoce dos presidentes desde su independencia de España en 1968
cías, a quien derrocó en un golpe de Estado en 1979.
Obiang, que dirige desde entonces con puño de hierro la nación y es el Jefe de Estado no monárquico con más tiempo en el poder del mundo, encabeza la candidatura del PDGE, que concurrió a la votación coaligado con 14 formaciones políticas.
Sus dos rivales son el secretario general de Convergencia Para la Democracia Social (CPDS, único partido de verdadera oposición autorizado), Andrés Esono, y el líder del Partido de la Coalición Social Demócrata (PCSD), Buenaventura Monsuy Asumu, tradicionalmente afín al PDGE.
“Estoy seguro de que la victoria es del PDGE”, afirmó Obiang tras votar en Malabo. Antes, su principal adversario, Andrés Esono, de 61 años, ejerció su derecho democrático en la isla de Bioko. “Desde las siete de la mañana mi teléfono no para de recibir quejas. Hay fraude, irregularidades, voto público. No se está dejando a la población votar libremente”, aseveró el líder opositor guineano.