Las curiosas normas del Mercado de la Encarnación en 1890
● Un documento hallado en el Archivo Municipal detalla cómo era el funcionamiento y los horarios de la plaza de abastos más antigua de Sevilla, inaugurada en 1842
Unas disposiciones que estaban expuestas y que dictaban el funcionamiento del edificio. El Archivo Municipal de Sevilla ha sacado a la luz un curioso documento con las normas de régimen interior y los horarios del Mercado de la Encarnación, uno de los más importantes de la ciudad y el más antiguo. El curioso documento en papel está fechado el 1 de julio de 1890 y se conserva en el marco de madera del tablón en el que seguramente estuviera expuesto en algún lugar de relevancia de la plaza.
La guardia municipal era la encargada de velar por el cumplimiento de unas normas que, por ejemplo, recogían los horarios de las distintas puertas según las épocas del año. El documento señala algunos aspectos interesantes que detallan cómo funcionaba este gran mercado. Los primeros que podían entrar al recinto eran los “tablageros y demás dueños de cajones” siempre que tuvieran la necesidad de arreglar con anticipación los artículos que iban a poner a la venta.
Llama la atención la extensión de los horarios, que se prolongaban desde muy temprano en la madrugada hasta las ocho de la noche en los meses de verano y media hora antes en invierno. El toque de una campana advertía de que era la hora de la clausura. Antes de cerrar, los guardias hacían una “escrupulosa requisa” acompañados de los guardas nocturnos para evitar que alguien pudiera permanecer oculto en el recinto.
También había que dar cuenta de los puestos que había vacíos para que no se ocuparan sin conocimiento de la autoridad. En caso de que los vendedores se retiraran pasadas las primeras horas de venta y dejaran sus puestos a otros, éstos abonarían los diez céntimos del impuesto, del que se llevaba un registro oficial.
“A veces en los archivos nos encontramos con documentos especiales por muy diversos motivos. Éste es el caso de este curioso documento original del Archivo Municipal de Sevilla, el anuncio de las normas de régimen interior y horarios del Mercado de la Encarnación fechado el primero de julio de 1890; horarios que en determinadas épocas del año llegaba a ser más vespertino que matutino –las tres y media de la madrugada– co