Diario de Sevilla

La raigambre gaditana y el afán de superación

● El presidente del jurado, el pintor Hernán Cortés, destaca el valor de un hombre que ha proyectado su futuro sin olvidar su origen

- V. León

Recordaba en su discurso Hernán Cortés, presidente del jurado del Premio Federico Joly, las palabras y filosofía que marcó Pedro Pérez-Llorca en su propio bufete. La de una organizaci­ón “que reconoce a las personas por su mérito probado en el trabajo y que ve como algo bueno las aportacion­es de quienes han tenido distintos niveles de dificultad en su desarrollo personal”. Una huella identitari­a de su vida y que ha querido marcar en el devenir de su propia empresa, porque tal y como decía el empresario “mi padre tenía una visión de un chico de Cádiz que vino a Madrid a hacer carrera y eso es parte del ADN de la firma”, recordaba Cortés para ensalzar los valores de una trayectori­a profesiona­l con importantí­simas miras de futuro, pero con un marcado origen que tiene su punto de partida en Cádiz. Un hombre hecho a sí mismo, que nació en Madrid, pero con una importante raigambre gaditana, cuyos principale­s valores han sido “el trabajo, la constancia, el afán de superación y el compromiso con una sociedad de su tiempo, los mismos que distinguie­ron al fundador de Diario de Cádiz, Federico Joly, a cuya memoria se instituyó este premio”.

El pintor gaditano, el mismo que inmortaliz­ó a un jovencísim­o José

Nada define mejor el ejemplo a seguir por los gaditanos que el mérito, superación y diversidad de Pedro Pérez-Llorca”

Pedro Perez-Llorca, y volvió a hacerlo de forma póstuma por encargo de su hijo para que luciera en su próspero despacho, procede de una familia muy vinculada a los Pérez-Llorca, unidos por la amistad, el trabajo constante y el gaditanism­o. De hecho, quiso remarcar Cortés el nombre de sus ancestros gaditanos, el del bisabuelo del galardonad­o, Leonardo Rodrigo Lavín, médico y docente universita­rio “que llego a Cádiz un día de intenso levante y se enamoró de la ciudad”. Su marcado carácter liberal “le costó la inhabilita­ción tras la Guerra Civil”, por lo que “se dedicó a la formación de sus nietos”, entre ellos la de José Pedro.

También mencionó a uno de sus hijos, Pedro Rodrigo Sabalette, catedrátic­o de Medicina, que falleció en la explosión del 47, y a la abuela del premiado, Carmen Rodrigo Sabalette, la madre de José Pedro, “la más gaditana de las gaditanas”, que se casó con el médico capitán de la Armada José Pérez-Llorca, oftalmólog­o y catedrátic­o de esta disciplina. “Mi padre que era pediatra lo admiraba y mantenía amistad con él. De niño era una presencia constante en las conversaci­ones de mi casa”, revivía el ilustre artista gaditano. Las sagas continuaro­n en la gran amistad que él mantuvo con su padre, “que me llevó al Patronato del Museo del Prado, donde fui testigo de su infatigabl­e quehacer y compartí con él su amor por Cádiz”.

Un amor incontesta­ble que mantiene su hijo, “digno heredero de esta saga”, de la que seguro procede “su curiosidad intelectua­l”, que le ha llevado a ostentar tres carreras y a cursar actualment­e Física. Un afán de crecimient­o impregnado en su bufete, –presente en Barcelona, Londres, Bruselas, Nueva York y ahora Asia–, y que ha sido “de sobra reconocido en numeroso foros”. Por todo, redundó Cortés, “nada define mejor el ejemplo a seguir por los gaditanos que lo que Pedro señala en estas líneas: mérito, superación y diversidad”. Y bien está que Cádiz, le reconozca estos valores”.

 ?? ?? El presidente del jurado, Hernán Cortés, durante su discurso.
El presidente del jurado, Hernán Cortés, durante su discurso.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain