Un empate con distintos sabores
El chile te puede gustar o no. Su picante no deja lugar a una verdad universal y así les pasó a México y Polonia, que empataron a cero en un partido con distintas perspectivas, dependiendo del punto de vista. Poco premio para una Tri dominante o bueno porque Ochoa paró un penalti a Lewandowski. En este caso, lo que es real es que ambas suman un punto más que la gran favorita del Grupo C, Argentina.
México llevó el control desde el inicio del encuentro. Ese era el plan. No centrarse en contrarrestar a Lewandowski, al que, por cierto, Edson Álvarez secó a la perfección. Ochoa vivió la primera parte de su quinto Mundial con una tranquilidad que seguramente no esperaba. Y que le duró poco. Un mal pasé de Jesús Gallardo en salida de balón le llegó a Edson Álvarez de espaldas. El resultado, un mano a mano de Lewandowski, de los que no falla a no ser que le hagan penalti. Héctor Moreno lo agarró de la camiseta y lo zancadilleó. El colegiado lo pitó tras el aviso del VAR. Ocasión perfecta en el minuto 58 para que el polaco rompiese su sequía en los Mundiales, pero se encontró con un Ochoa que no jugó sólo por hacer historia con su quinto mundial.