Catorce agentes montados en la misma moto
● Rescatan unas imágenes de 1987, en la que los agentes hacían acrobacias en la Plaza de España
La Policía Local de Sevilla ha rescatado unas curiosas imágenes de una exhibición celebrada en la Plaza de España en el año 1987. Los agentes realizan varios ejercicios con sus motocicletas, como pasar por un aro de fuego o por unos tablones inclinados con un solo punto de apoyo. Impensables hoy en día. Pero lo que verdaderamente llama la atención es un número acrobático con 14 policías locales subidos en una moto.
Las imágenes pudieron verse ayer con motivo del día de San Clemente, patrón del cuerpo, en un excelente vídeo institucional de la Policía Local de Sevilla, elaborado por el periodista y reportero gráfico Mariano Valladolid. El vídeo reconoce el papel de los policías jubilados y en él participan algunos de los agentes que formaron parte de aquella exhibición.
Luis Venegas era el policía que coronaba la pirámide humana sobre la moto, pues era el que menos pesaba. Pilotaba el vehículo Francisco López, ya fallecido, y sobre él desfilaban varios agentes que iban incluso abriendo los brazos y piernas durante la exhibición. Otro policía iba en posición horizontal a modo de mascarón de proa. La moto tuvo que ser modificada para aguantar el peso de tantas personas.
Son varios los policías que participan en el vídeo. El más veterano de todos es Antonio Rodríguez Gallardo, que toma el walkie una última vez para saludar a todos sus compañeros de servicio. “Aquí M-100”, se dirige Rodríguez Gallardo a los policías. Otros de los agentes entrevistados son Benito Rodríguez, Miguel Sánchez (conocido por todos en la Policía Local como el Pistola por ser el responsable de la sección de armamento), Benito Rodríguez o el sindicalista Manuel Bustelo. Todos coinciden en que se ganaba poco y que la mayoría de los policías tenían dos y hasta tres trabajos.
Dos de las mujeres de la primera promoción, Luisa Franco y Carmen Ramos, cuentan cómo fue la incorporación de la mujer a la Policía Local en el año 1981. Al principio sufrieron cierto rechazo por parte de algunos compañeros, mientras que otros las trataban como hijas y eran muy protectores con ellas. Con el trabajo se fueron ganando el respeto de todos.