Del estigma y el tabú a la esperanza
● En España podría haber 1,7 millones de largos supervivientes de cáncer ● La percepción social de la enfermedad va cambiando impulsada por mejores diagnósticos y tratamientos
El número de cánceres diagnosticados en España este año se estima que alcanzará los 279.260 casos, según el informe Las cifras del cáncer en España 2023, que ha sido presentado hoy, con motivo de la conmemoración el próximo 4 de febrero del Día Mundial del Cáncer. El informe Las cifras del cáncer en España 2023 ha sido editado por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), en colaboración con la Red Española de Registros de Cáncer (Redecan).
Los cánceres responsables del mayor número de fallecimientos a nivel mundial fueron el de pulmón (18,2% del total de muertes por cáncer), el colorrectal (9,5%), el hepático (8,4%), el de estómago (7,8%) y el de mama (6,9%). La supervivencia de los pacientes con cáncer de España se ha duplicado en los últimos 40 años y es probable que, aunque lentamente, continúe aumentando en los próximos años.
Aunque es complejo generalizar, a la hora de explicar la evolución sufrida en el abordaje del cáncer y los factores que más han influido en ese desarrollo, el doctor Enrique Aranda, miembro de la Comisión Permanente de la Fundación ECO y jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, subraya que “afortunadamente se ha vencido el tabú de la palabra cáncer, que en cierto modo se escondía, y hoy día la enfermedad socialmente se afronta de otra manera”. Además, han cambiado radicalmente las posibilidades de tratamiento del cáncer, “tanto desde el punto de vista diagnóstico como desde la visión multidisciplinar, que ha permitido un abordaje menos atomizado, y con un importante progreso en las terapias disponibles aumentando la eficacia y disminuyendo la toxicidad. “La innovación terapéutica ha sido radical. En mi ámbito de especialización que es el tumor colorrectal, el desarrollo ha sido espectacular, dando una esperanza de vida, una supervivencia y una calidad de vida que antes era impensable”, aclara Aranda.
En su opinión, se ha ido evolucionando para lograr poner al paciente en el centro del sistema y que los distintos profesionales implicados en su atención giren en torno a él y no sea el paciente el que deba peregrinar por las distintas parcelas.
Además, otro paso ha venido dado por el conocimiento de las alteraciones moleculares implicadas en cada tipo de tumor, lo que ha permitido el desarrollo de tratamientos dirigidos contra esas dianas terapéuticas específicas. Son tratamientos mucho más dirigidos, precisos e individualizados. Para el experto, ahora se ha ido incorporando otras innovaciones clave, como la secuenciación masiva que permite conocer las mutaciones presentes en cada tumor o la biopsia líquida, “que permite solo con un análisis de sangre lograr una foto dinámica de lo que ocurre en cada momento y podemos ir adaptando el tratamiento al momento concreto de cada paciente”, subraya. Por último, la llegada de la inmunoterapia está siendo un revulsivo fundamental en el abordaje de determinados tipos de cáncer. Si bien es una idea antigua desde el nacimiento de los tratamientos inmunomoduladores, los avances sufridos en los últimos años han traído una inmunoterapia más dirigida.
Todo esto ha propiciado el crecimiento exponencial de los largos supervivientes. En España puede haber actualmente entre 1,3 y 1,7 millones de largos supervivientes de cáncer.
Los tratamientos de frontera más innovadores, como los CART, que han ido cambiando radicalmente el tratamiento de algunas enfermedades oncohematológicas, podrían en el futuro alumbrar nuevas esperanzas en otros tipos de cáncer, con resultados muy ilusionantes.
Por otro lado, España está situada entre los países punteros a nivel mundial en investigación clínica y en el desarrollo de ensayos con nuevos tratamientos. “Si bien es cierto que muchos de estos ensayos están muy centrados en hospitales de Barcelona y Madrid y deberían armonizarse mejor en el resto de las comunidades autónomas para que el acceso a estos ensayos no plantee diferencias en función del código postal”, advierte el doctor Aranda.
En su opinión, la formación y el funcionamiento de los comités de tumores ha sido muy importante.
Del mismo modo, la evolución en las redesde de cuidados paliativos ha mejorado enormemente. Respecto a las áreas de mejora, “nos está costando implantar bien la asistencia psicológica tanto de pacientes como de familiares”, señala.
En cuanto a las asociaciones de pacientes han sufrido un incremento grande y realizan una gran labor, “aunque quizás no tienen el peso, la influencia y la fuerza reivindicativa que sus semejantes en el mundo anglosajón”, matiza el doctor Aranda.
Por último, destacó la labor de los grupos cooperativos que han hecho posible el impulso de la investigación clínica en España.
Enrique Aranda
Oncólogo médico Afortunadamente, se ha vencido el tabú de la palabra cáncer y hoy se afronta de otra manera”