Entre hazañas y avisos
● El Atlético visita Dortmund con ventaja, pero sin exceso de confianza
Vencedor en el Cívitas Metropolitano, pendiente la clasificación para las semifinales de la Liga de Campeones en el volcánico Signal Iduna Park, la ventaja de 2-1 del encuentro de ida rememora otros desafíos de tanta o más dimensión del Atlético de Madrid de Diego Simeone en el torneo, como la hazaña de Múnich en 2016, el milagro de Liverpool en 2020 o el batacazo de Turín en 2019, que lo advierte para la vuelta.
El gol de Haller en el minuto 82 rebajó la renta del Atlético, ganador, en cualquier caso, del primer duelo de la serie contra el conjunto alemán. Queda la vuelta en el estadio germano ante el muro amarillo, la tribuna más grande de Europa, estruendosa e intimidante. El grupo de Simeone tiene precedentes para la convicción... Y la desconfianza.
El 3 de mayo de 2016, en semifinales, el equipo llegaba al Allianz Arena de Múnich con un 1-0 de renta. Un reto descomunal contra el poderoso Bayern, vencedor de todos y cada uno de sus once partidos precedentes como local antes de esa cita, dirigido por Pep Guardiola. El Atlético sufrió. Y pasó. Necesitó la versión más imponente de Oblak, que incluso detuvo un penalti inapropiado de Giménez. Lo lanzó Müller en el minuto 35. Un momento clave. Cuatro antes Xabi Alonso había marcado el 1-0 que equilibraba la eliminatoria entre la tremenda ofensiva local.
Diez paradas hizo el portero esloveno, el soporte principal de la resistencia del Atlético, hasta que un contraataque relanzó al conjunto rojiblanco, que pese al tanto de Lewandowski logró el pase a la final de San Siro.
El 12 de abril de 2017 afrontó el Atlético los cuartos de final en el estadio King Power de Leicester. El Atlético había vencido en la ida en el Vicente Calderón por 1-0, gol anotado por Griezmann de penalti. Le quedaba la vuelta para avanzar por última vez a las semifinales de la competición. Lo hizo con un empate a uno, abierto por Saúl Ñíguez, en el minuto 26, y nivelado por Jamie Vardy a la hora de encuentro.
También hay malos precedentes, como fue el desplome de Turín en marzo de 2019. Fue en octavos de final en el Juventus Stadium. El batacazo del Atlético fue estruendoso, inimaginable cuando una semana antes, en el Metropolitano, había doblegado por 2-0 al equipo de Cristiano Ronaldo, Mandzukic, Dybala, Matuidi, Pjanic, Bonucci o Chiellini, entre otros. En la vuelta Massimiliano Allegri y su plan desbordaron al Atlético. Con los cambios en el once inicial de Bernardeschi, Emre Can, Joao Cancelo y Lucas Spinazzola. Cristiano Ronaldo marcó los tres goles. Eliminado. El último fue de penalti en el tramo final. Lo cometió Correa con una imprudencia.
Un año después el Atlético demostró que lo mismo que se cae se levanta y firmó el milagro de Anfield en los octavos de final.
Saúl, en el minuto 4, dio ventaja al Atlético en la ida en el Metropolitano (1-0), antes de la apabullante ofensiva que sufrió en el encuentro de vuelta, cuando Oblak se transformó en una especie de súper héroe que lo alcanzó casi todo, con una actuación memorable, asombrosa e irrepetible, para sostener a su equipo hasta la prórroga.
En una secuencia interminable e insistente de ocasiones del Liverpool, ya dirigido por Jürgen Klopp, surgió el meta esloveno imponente, casi imbatible. Wijnaldum niveló la eliminatoria al borde del descanso, pero el Atlético aguantó al borde del precipicio. Sobrevivió.
Y de forma milagrosa, aún más cuando Firmino anotó el 2-0 en el minuto 4 del tiempo extra, se clasificó cuando Marcos Llorente remarcó su capacidad goleadora, con dos tiros y dos goles, en los minutos 97 y 105, que lo cambiaron todo. La sentencia, a pase suyo, fue de Morata, que redondeó una noche mágica que pasó a la historia del Atlético. En cuartos, en la final a ocho en Lisboa por la pandemia de la Covid-19, fue eliminado por el Leipzig por 2-1.
La alineación de Anfield la formaron Oblak; Trippier, Savic, Felipe Monteiro, Lodi; Ángel Correa, Koke, Thomas Partey, Saúl Ñíguez; Diego Costa y Joao Félix.
Hoy, de todos ellos, sólo el portero esloveno y el capitán forman parte del once tipo de Simeone. Llorente, Morata y Giménez entraron después al terreno. Son los cinco jugadores de entonces a ahora que apuntan a la titularidad en el Signal Iduna Park.
En 2019 fue a Turín con un 2-0 a favor y acabó eliminado con tres tantos de Cristiano