“Para saber si va a llover fuerte no hace falta alarmar”
–¿Cómo ha vivido la Semana Santa más lluviosa?
–Esta Semana Santa pasará a ser recordada como una de las más lluviosas de las que se tienen datos en nuestra comunidad. Sin duda alguna, este año ha sido el más complejo en cuanto a volumen de trabajo por las inclemencias meteorológicas. No sólo la lluvia sino también el viento han factores limitantes para muchas hermandades y cofradías.
–¿A cuántas hermandades ha asesorado?
–A 142 hermandades y cofradías de todos los rincones de nuestra comunidad, desde Huelva hasta Almería. Ha sido todo un reto tenerlos informados a cada instante con partes meteorológicos personalizados.
–¿Cómo definiría la Semana Santa, desde el punto de vista meteorológico?
–En términos meteorológicos ha sido excelente para nuestros intereses debido a la abundante precipitación, que ha triplicado en muchas zonas a la media del mes de marzo. En particular, durante la Semana Santa se han recogido más de 100 litros en multitud de localidades del interior y más de 300 litros en zonas de sierra como es el caso de la Sierra Norte de Sevilla o Grazalema. Ha sido una semana en la que hemos tenido de todo, como es normal en primavera, si bien es cierto que es bastante difícil que se registren precipitaciones superiores al litro por metro cuadrado durante siete días consecutivos, y más a finales del mes de marzo. La responsable ha sido principalmente la borrasca Nelson.
–Ha acertado usted prácticamente en todo, hemos visto incluso que le han dedicado levantás, ¿se siente casi una parte más de las hermandades?
–En primer lugar, hay que recalcar que este servicio lo hemos dado varios compañeros, aunque haya sido yo el que haya gestionado todo con las hermandades. No es el trabajo de una sola persona, aunque yo sea la cara visible de las redes sociales. Aquí no se trata de acertar o no, pues la atmósfera siempre es un sistema caótico sujeto a multitud de variables que pueden hacer variar la previsión en cuestión de horas. El nivel de acierto ha sido del 92% con las hermandades que hemos trabajado, con lo cual es una magnífica noticia para nosotros, y en especial, cuando te hacen llegar cartas de agradecimiento, detalles de sus titulares, levantás… Como cofrade y creyente, claro que me siento en el plano personal como una parte importante de la hermandad.
–También hubo alguna cofradía que desoyó sus consejos y luego se equivocó, ¿le echan las culpas después al meteorólogo?
–Sólo hubo una cofradía que desoyó nuestros consejos pero no fue tan así. Recibidos todos los partes, habiendo hablado en el cabildo de oficiales de junta, se explicaron los últimos detalles de cómo se planteaba la jornada. Ocurrió que, minutos antes de la salida, llegó otra información de otra entidad meteorológica más relevante y de carácter público estatal que manejaba una mejoría notoria hasta una determinada hora. La hermandad se dejó guiar por esa previsión de última hora de ese organismo y se mojaron bastante. Aún así, la decisión de su junta de gobierno es soberana siempre. Ese es un problema común en muchas hermandades, manejar varias previsiones de distinta índole y procedencia, entre tantos nervios previos a la salida, puede llevar a confusión. –De Andalmet llama la atención la explicación clara y coloquial de los fenómenos meteorológicos, ¿al gran público le hacía falta que alguien utilizara expresiones como “la traca final”
En Semana Santa nos han dedicado ‘levantás’, claro que nos hemos sentido parte de las cofradías”
o “lluvia de la que empapa” y no tanto término técnico?
–Andalmet nace con la única intención de tener nuestro propio servicio meteorológico privado, como existe en otras comunidades y específico de nuestra tierra, y aquí se trata de no engañar al consumidor final de nuestro producto. Andalucía, por desgracia, es una tierra olvidada por parte de los medios que informan del tiempo a escala nacional, siempre pasamos de largo. Teníamos claro que, para el público en general, el que está a pie de calle, lo que le
interesa es saber la realidad de una manera sencilla o locuaz. Para saber si va a llover fuerte o no, no hace falta alarmar a la población como ocurre hoy en día con los medios de comunicación cada vez que se acerca una borrasca normal y corriente de las de toda la vida, si no, que le pregunten a la gente del campo.
–Recordemos que el lunes antes de la Semana Santa, algunas predicciones, incluso la oficial de Aemet, auguraba un inicio de Semana Santa sin lluvia, ¿tiene sentido hacer predic-*
ciones a más de una semana vista en estas fechas?
-Desgraciadamente es algo que no llegamos a entender desde nuestros conocimientos. Aemet auguraba temperaturas cálidas y un inicio de la Semana Santa estable y sin precipitaciones. Todos, absolutamente todos, sabíamos que eso no iba a ser de esa manera. Es cuestión de mirar el por qué de esas afirmaciones tan desacertadas viniendo de un organismo público de carácter estatal. ¿Quizás por el turismo y el miedo a cancelaciones? Podría ser objetivamente.