Juzgan a un ex sacerdote por ofrecer dinero y droga a menores a cambio de sexo
El ex sacerdote Jesús María Menéndez, conocido como el padre Chus, de 72 años, acusado de proponer sexo a menores a cambio de dinero y droga en su piso de Gijón, se ha declarado inocente en el juicio que ayer se celebró a puerta cerrada en la Audiencia Provincial de Oviedo.
Así lo apuntó a los periodistas el abogado del ex sacerdote, Javier Dapena, momentos antes del inicio de la vista oral en la Sección Octava de la Audiencia, con sede Gijón, cuyo tribunal ha decidido que su desarrollo sea a puerta cerrada.
El conocido como padre Chus, que estuvo en prisión provisional por esta causa desde el 13 de noviembre de 2021 hasta el 24 de marzo de 2022, afronta una petición de la Fiscalía de 10 años de prisión por tres delitos de corrupción de menores y otro contra la salud pública.
Jesús María Menéndez fue expulsado del clero en 2015 en una decisión adoptada directamente por el Papa al considerar que había llevado a cabo acciones pecaminosas y contra el Derecho Canónico por presuntamente abusar sexualmente de adolescentes de 17 años.
Antes de su expulsión, el padre Chus había sido párroco de Castiello de la Marina, en Villaviciosa (Asturias), y de otras localidades asturianas, había ejercido de profesor de religión y regentado una casa de acogida para extranjeros con dificultades en Gijón.
Según el Ministerio Público, fue precisamente en Gijón, y al menos desde 2015, donde el padre Chus contactaba con menores para invitarles a acudir a su domicilio, donde les entregaba pequeñas cantidades de dinero o les facilitaba hachís, que consumían en el salón y en su presencia.
La Fiscalía sostiene que el ex sacerdote pretendía ganarse la confianza del mayor número de chicos posible con la finalidad de mantener relación sexuales con ellos bajo la promesa de facilitarles dinero, hachís o permitirles estar en su casa consumiendo droga.
La Fiscalía pide 10 años de cárcel para padre Chus, que fue expulsado del clero