La rebeldía de Ana Blandiana gana el Princesa de Asturias de las Letras
● El jurado valora su “capacidad extraordinaria de resistencia frente a la censura” a través de una “poesía indómita”
La poeta Ana Blandiana (Timisoara, Rumanía, 1942) ganó ayer el Premio Princesa de las Letras 2024. Se trata de una autora de culto en toda Europa –y la figura literaria más internacional de su país– por su firme defensa de los derechos humanos y las libertades cívicas. Su posicionamiento fue especialmente fuerte durante los años del régimen de Nicolae Ceaucescu y su trayectoria recoge el testigo del japonés Haruki Murakami. “Gracias por el eco que su prestigioso premio dará a mis ideas y mis poemas y que lo amplificará en la conciencia de los lectores españoles de todo el mundo”, manifestó Blandina tras conocer el fallo del jurado.
“Siempre he pensado que el artista es un mago, no un artesano. Para mí, el poeta no es alguien que martillea las palabras para que suenen bien, sino alguien que intenta que el silencio que las separa sea expresivo”. Así de contundente se mostró la escritora en una entrevista al Grupo Joly durante su última visita a Sevilla, en 2022. En este sentido, manifestó que su “mayor y más doloroso problema a lo largo de los años de dictadura fue el sentimiento de culpa por no poder hacer más –es decir, algo más que protestar a través de la escritura– contra el mal que estaba disolviendo nuestras vidas y nuestro país”.
Precisamente su “capacidad extraordinaria de resistencia frente a la censura” fue una de las cualidades principales que ha valorado el jurado del Premio Princesa de Asturias en su acta, pero también que se haya tratado de “una creadora radicalmente singular”, porque “su escritura, que aúna transparencia y complejidad, plantea preguntas fundamentales sobre la existencia del ser humano, en soledad y sociedad, ante la naturaleza y la historia”. La candidatura de Blandiana fue propuesta por Ricardo Rivero Ortega, rector de la Universidad de Salamanca.
Poetisa, ensayista y política, publicó en 1964 su primer libro de poemas, Primera persona del plural, y alcanzó el éxito con El talón vulnerable (1966) y El tercer sacramento (1969). Hija de un enemigo del pueblo, se le prohibió estudiar en la universidad tras la aparición en 1959 de su primer poema en una revista. A finales de los ochenta empezó a escribir poesía de protesta. Tras la revolución de 1989, inició su vida política con una campaña que promovía la eliminación del legado comunista y la creación de una sociedad abierta. Presidenta de honor del PEN de Rumanía, es miembro de la Academia Europea de Poesía, de la Academia de Poesía Mallarmé, de la Academia Mundial de Poesía (Unesco) y de la Unión de Escritores de Rumanía. Desde 1994 es miembro fundador y presidenta de la Fundación La Alianza Cívica, un movimiento apolítico cuyo propósito es aliviar las consecuencias de más de cincuenta años de comunismo en el país.
La obra de Blandiana refleja –según se ha escrito– un profundo conocimiento del espíritu rumano durante un histórico período de opresión, y establece como directrices de su proyecto literario la derrota y la esperanza. Conocida por su poesía anticomunista, Blandiana se distinguió por una rebeldía sublime que la llevó durante años a vivir como una exiliada dentro de su propio país. Obras suyas son, además de las citadas, 50 poemas (1970), Octubre, noviembre, diciembre (1972), Acontecimientos en mi jardín (1980), La hora de arena (1984), Acontecimientos en mi calle (1988), La arquitectura de las olas (1990), 100 poemas (1991), La primera mañana después de la muerte (1996), Cosecha de ángeles (1997), El libro blanco de Arpagic (1998), Sol, entonces (2000), Poemas (19642004), Para ser o buscar (2005), Patria mía A4 (2010) y Variaciones sobre un tema dado (2018).
La autora alberga distinciones como el Premio de Poesía de la Unión de Escritores de Rumanía, el Premio de Poesía de la Academia Rumana, el Premio Internacional Gottfried von Herder de la Universidad de Viena, el Premio Nacional de Poesía, el Premio Opera Omnia, el Premio Internacional Vilenica y el Premio Poeta Europeo de Libertad, además de la Legión de Honor francesa. Es doctora honoris causa por las universidades de Salamanca y Sofía, entre otras.
Su poesía, romántica, contemplativa y visionaria, está basada en el sentimiento trágico de la existencia porque nació, como explica ella misma, en un tiempo en el que “ser libre es más difícil que no serlo, en un tiempo, en el que, paradójicamente, la libertad de la palabra disminuye la importancia de la palabra”.
En la época actual, asegura, eminentemente materialista, la utilidad de la poesía es que “tiene que ser ella misma y mediante lo que ella es, salva a los demás y les permite ser mejores”. Para eso recurre a una poesía intimista, desprovista de todos los adornos, “de pureza” en la que “renuncia a las palabras” en la medida de lo posible.
En esta edición concurría al galardón 38 candidaturas de 21 nacionalidades
Ana Blandiana Poeta
Gracias por el eco que su prestigioso premio dará a mis ideas y mis poemas ”