Valencia agua la fiesta catarí
Comenzaba la Copa del Mundo y las expectativas generadas con respecto al equipo anfitrión eran altas. Félix Sánchez, técnico de la selección catarí criado en la Masía, llevaba meses con la selección concentrada preparando esta importante cita. Tuve la suerte de enfrentar a Catar hace poco más de un mes en España con la selección a la que orgullosamente represento, Nicaragua, y pude apreciar en primera persona algunas claves con las que Félix buscaba ser protagonista, aunque ni contra nosotros ni contra Ecuador en mayor medida pudieron llevarlas a cabo.
El conjunto árabe pretendía jugar con línea de 3, a veces de 5, buscando una superioridad posicional en todos los sectores del campo con sus dos carrileros, Pedro Miguel y Ahmed, que son de sus jugadores más destacados. En medio campo nunca pudieron tener una posesión que dañara a Ecuador, más bien esto produjo pérdidas tanto de balón como de confianza que dejó de manifiesto algunos errores tácticos que impidieron a Catar tener opción alguna. En la parcela ofensiva todo el juego se encomienda a la inspiración de Afif, la estrella del equipo que pasó por el Juvenil del Sevilla y los primeros equipos de Villarreal y Sporting.
Ecuador contrarrestó rápido la propuesta de Catar, que lejos de ser una selección pasional y entregada al público por su condición de anfitriona, se presentó como un conjunto algo frío al que le faltó ese ‘punch’ adicional. Empuje fue lo que no le faltó a Ecuador, que salió con una idea clara y se mostró como una selección fuerte y rápida. Enner Valencia siguió agrandando su figura y se aprovechó de una frágil Catar para erigirse como el máximo goleador ecuatoriano en la historia de los mundiales.
Veremos si Catar es capaz de enderezar el rumbo en el torneo. Y atención a Ecuador, que con esta determinación y este subidón anímico puede optar a clasificar para la siguiente fase.
Futbolista oscense del Real Estelí, internacional con Nicaragua