Treinta años del Rastrillo solidario de Manos Unidas Huesca
La entidad celebra el aniversario “de la historia de un sueño” que se hizo realidad con mucha ilusión
MANOS Unidas Huesca celebra el aniversario “de la historia de un sueño”. En el año 1990, nuestra querida Amalia Oliván, delegada por entonces de Manos Unidas Huesca, trajo la idea de crear un Rastrillo de una de sus primeras Asambleas Generales. En aquellos días, varias voluntarias se reunían todos los jueves por la tarde en las salas de la Parroquia de Santiago de Huesca para realizar labores y manualidades. Así que, contando con una idea: crear un Rastrillo Solidario; y disponiendo de material que ofrecer, se trabajó para hacerlo realidad.
La primera edición se desarrolló del 16 al 23 de febrero de 1992 en los salones del entonces Círculo Oscense. ¡Comenzaba la historia de un sueño! En 1993 se decidió cambiar las fechas al mes de diciembre, del 4 al 12, y aprovechar la cercanía de las fiestas de la Navidad. En 2003, la Parroquia de Santiago, decidió acoger el Rastrillo en sus locales y desde entonces hasta ahora, “sigue siendo parte imprescindible para realizarlo y poder continuar apoyando proyectos como el de este año: orientado a la “Mejora del Nivel socioeconómico y educativo de las mujeres y sus familias en Danka, Etiopía”. Paso a paso se han alcanzado “30 años de ilusión, de compromiso, de trabajo, de generosidad y de entrega, todo, gracias a las voluntarias que son la verdadera alma de este Rastrillo”, resaltan desde la presidencia de Manos Unidas. Pero esta celebración -insisten-, no es sólo nuestra, “es de todos los colaboradores que donan generosamente sus productos y de todos los oscenses que nos visitan y ayudan a hacer realidad los proyectos que Manos Unidas lleva a cabo para paliar la pobreza y la desigualdad que azotan nuestro mundo”. Feliz 30 Aniversario. ●
Manos Unidas lleva a cabo proyectos solidarios para paliar la pobreza y la desigualdad que azota el mundo